Se terminó la XV edición del FIB y haciendo un resumen el balance del mismo es una mezcla de luces y sombras. Los organizadores no pueden estar más que satisfechos, en plena crisis económica el FIB ha mejorado sus números con respecto a ediciones anteriores, en un año que se ha llevado por delante otros festivales como el ‘Summercase’. Abonos agotados desde hace meses, más de 200.000 visitantes en los cuatro días que ha durado, lo que representa 52.000 más con respecto a 2008, con un 60 % de público foráneo y un 40 % nacional.. Pero no sólo de cifras vive el FIB. Veamos que ha sido lo mejor y lo peor del FIB que acaba.
Lo más destacado:
Franz Ferdinand: Demostraron su condición como uno de los grupos más destacados de la década que se nos va. Devolvieron la sonrisa a muchos ‘
fibers’ después del vendaval del viernes, gracias a su increíble capacidad de convertir todos y cada uno de sus conciertos en una fiesta.
Josele Santiago: El ‘capo’ del rock castizo dio el recital más auténtico de todo el festival. Sin recurrir a nada de su etapa al frente de
Los Enemigos, Josele emocionó al público (al nacional, claro) con su repertorio en solitario. Ole Josele.
Oasis: Los
Gallagher se impusieron a un desastroso sonido gracias a un increíble repertorio. Siguen dando ganas de matarles pero cuando suena “Live forever” te tienes que rendir.
Lo más negativo:
El vendaval y las suspensiones: Contra la naturaleza no se puede hacer nada, pero cuando pagas una entrada te gusta a ver a toda la gente que viene en el cartel.
Kings of Leon, debido a problemas de fechas, y
Lilly Allen, por enfermedad, se echaron de menos pero lo peor fue la suspensión en mitad del concierto de
Paul Weller, justo cuando acababa de tocar “
Eton riffles”, del subidón al bajón en unas décimas de segundo. Bravo por
Los Planetas y
Maximo Park por quedarse y cumplir con la gente.
Los horarios a 7 euros: “
¿A qué hora toca 'tal' grupo?” fue una de las preguntas más frecuentes entre los asistentes al festival. La organización ya no reparte gratuitamente el librito de horarios, ahora se vende a 7 euros, lo que ha llevado a varios ‘fibers’ a perderse algún concierto importante.
Russian Red: Tan sólo citaré a
Homer Simpson, “Me aburro”.
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