Durante la semana pasada Puigcercós no pudo cerrar acuerdos con el resto de candidaturas, ni con las críticas, Reagrupapent.Cat ni Esquerra Independentista, que lideran respectivamente, Joan Carretero y Uriel Bertran. Más cerca de un acuerdo se ha estado con la corriente oficialista ERCfutur, que inspira Josep Lluís Carod-Rovira, aunque él no se presentaba.
Puestas así las cosas, el congreso de ERC ha terminado con tensión. Concretamente con una sonora bronca entre los partidarios de Joan Puigcercós y los de Josep-Lluís Carod-Rovira. Ni siquiera ha sido posible pactar una ejecutiva entre los dos sectores oficialistas, que han acabado rompiendo todas las negociaciones. Hasta el punto que el sector Puigcercós ha difundido una nota pública en que acusa los partidarios de Carod de "carencia de confianza en la última fase de la negociación".
Esta "carencia de confianza" se debe, según fuentes consultadas, a que la candidatura de Xavier Vendrell, la mano derecha de Puigcercós y responsable de organización de la ejecutiva saliente, podría haber sufrido un fuerte voto de castigo a la hora de ser votada.
Por lo que se refiere a la ponencia marco, ha conseguido el apoyo básicamente de los partidarios de Puicercós y se ha librado del voto de castigo de la tendencia que lidera Joan Carretero porqué esta no ha sometido su ponencia alternativa a votación. Sólo algunas enmiendas parciales defendidas por el sector de Carod han sido asumidas por la mayoría.
Recordar que las tendencias de Puigcerós y Carod coinciden en seguir en el Tripartito, mientras que de Carretero y Bertran apuntaban la posibilidad de romper el acuerdo de izquierdas.
De hecho, en la práctica, el espacio "carodista" se ha dividido en dos. Los unos, liderados por Ernest Benach, presidente del Parlamento de Cataluña, querían pactar la nueva ejecutiva y votar monolíticamente con los partidarios de Puigcercós. Los otros, encabezados por Rafael Niubó, pretendían colaborar con los críticos de Reagrupament.cat y Esquerra Independentista y aplicar un fuerte voto de castigo contra Xavier Vendrell.
El caso es que la "cuestión Vendrell" ha acabado de envenenar la relación entre los dos sectores oficialistas y ahora la nueva ejecutiva representará, en exclusiva, el 37 por ciento de militantes que apoyaron a Puigcercós, con la única presencia añadida de algunos cargos institucionales.
Por el contrario, los otros nombres propuestos por Puigcercós y Ridao sí que han conseguido superar el corte.
El hasta ahora vicesecretario general de Coordinación Interna y Acción Electoral de ERC, Xavier Vendrell, no ha conseguido el apoyo suficiente de la militancia del partido por volver a formar parte de la Ejecutiva Nacional. Según fuentes del partido, Vendrell se ha quedado a unos cien votos aproximadamente de pasar el corte necesario, un hecho que sí han conseguido los otros candidatos.
Puigcercós ha propuesto a la militancia el nombre de Carmel Mòdol, presidente del Consejo Nacional del partido como nuevo responsable de organización. En la propuesta de Ejecutiva presentada a la militancia, Vendrell ocupaba el lugar de vicesecretario general de Política Institucional, un cargo que no podrá ocupar al no haber conseguido el apoyo necesario por un margen reducido. De hecho, el nombre de Vendrell se ha convertido en un asunto controvertido a lo largo de la negociación con las otras candidaturas e incluso fuentes próximas al presidente del partido han denunciado que desde ERCFutur , el sector carodista, se había intentado ''vetar'' su nombre a la Ejecutiva. Vendrell es un hombre de confianza de Puigcercós y desde varios sectores se le ha atribuido el control del aparato del partido. Por el contrario, los otras nombres propuestos por Puigcercós y Ridao sí que han conseguido superar el corte.
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