Todo sobre el 'caso Zaplana'

Caras largas y en su mayoría de sorpresa

Aunque en su fueron interno muchos lo veían venir casi ninguno pensaba que iba a ser precisamente ahora. Pero lo cierto es que los diputados del PP salían de la reunión que celebró el Grupo Popular presidida por Mariano Rajoy antes del inicio pleno del Congreso con la confirmación de que la profunda crisis que vive el partido, lejos de amainar,  se acrecienta. La inesperada renuncia de Eduardo Zaplana a su escaño de diputado por Madrid para irse a Telefónica fue recibida como un mazazo y como el preludio de lo que podría ser un desfile de renuncias de otros destacados dirigentes y figuras del PP. En la mente de todos estaban dos nombres: el de Manuel Pizarro y el de Juan Costa.

La noticia la dejó caer el propio Mariano Rajoy al inicio de su intervención ante el plenario de su grupo, después de haber  dejado hablar a varios diputados, como la portavoz, Soraya Sáenz de Santamaría, -a quien Rajoy se lo había comunicado antes- Gustavo de Aristegui, Ana Torme, Federico Trillo, Bettina Rodríguez Salmones o Andrés Ayala, que, lógicamente, no hicieron alusión a la macha del anterior portavoz parlamentario porque no lo sabían.

¿Qué dijo Rajoy?

Rajoy se limitó a comentar que Zaplana le había comunicado su decisión de abandonar el escaño para ser delegado para Europa de Telefónica. El presidente del PP manifestó su respeto y agradeció ante los diputados el trabajo desempeñado por  Zaplana  estos cuatro años como portavoz del grupo. Las caras de unos y otros eran de estupor. Los consultados por este diario comentaban que suponían que “Eduardo estaba barajando marcharse” pero añadían que lo lógico era que hubiera esperado al XVI Congreso Nacional que se celebra en junio en Valencia.

Finalizada la reunión del grupo, Sáenz de Santamaría, en rueda de prensa, desveló que Zaplana no la había llamado previamente para explicarle sus razones de su marcha que la portavoz del grupo tampoco supo explicar con claridad. Se la notaba un tanto azorada.  “El señor Zaplana se lo comunicó  a quien tenía que comunicárselo”, es decir, a Rajoy, se limitó contestar Soraya sin ocultar que “echará de menos” a su predecesor en el cargo de quien ahora comprende mucho mejor “lo difícil que es estar al frente de esta tarea”.

Fuera, en los pasillos, Manuel Pizarro evitaba manifestar su opinión pese a la insistencia de los periodistas. Tampoco estaban por la labor ni Ángel Acebes ni Juan Costa, que entraron en el hemiciclo nada más iniciarse la sesión plenaria.

Los 'nuevos' nombres

Minutos después se hacían públicos los nombres que ocuparán las presidencias de las cuatro Comisiones parlamentarias que corresponden al PP y que han recaído en la ex presidenta del Congreso, Luisa Fernanda Rudi (Control de RTVE); Miguel Arias Cañete (Mixta para la UE); Jesús Posada (Presupuestos) y el leonés Juan Morano (Pacto de Toledo). Y también se conocían los nombres de los portavoces y portavoces adjuntos que trabajarán en las Comisiones cuya ampliación aprobaba este martes el pleno del Congreso. Ni Acebes, ni Pizarro, ni Costa ni tan siquiera el valenciano Esteban González Pons -cuyo nombre se barajó para ocupar la portavocía del grupo junto con el de Pizarro- figuran en la lista. Algo que, salvo sorpresas, también se esperaba.

Sáenz de Santamaría salía al paso sobre esta exclusión ‘voluntaria’ de los cuatro pesos pesados. La portavoz explicó que había hablado “con todos los diputados” y los había “escuchado”  pero no se adentró demasiado en los motivos por los que ninguno de los cuatro tiene responsabilidades en la nueva etapa. La portavoz opinó que todos aportarán su experiencia y trabajarán en esta legislatura como cualquier otro diputado, pero nada más. 

Pero la pregunta que flotaba en el ambiente era si la marcha de Zaplana será el preludio de otros abandonos antes de que se celebre el Congreso de junio.