Muy a su pesar, pero sin perder la sonrisa – incluso a veces un tanto irónica- , la número dos de Rajoy tuvo que sortear numerosas preguntas de los periodistas sobre Cascos y la crisis que se ha abierto en Asturias después de que éste se sintiera despechado por no haber sido elegido candidato autonómico y la dirección del PP decidiera nombrar a la concejala Isabel Pérez- Espinosa.
Su primera respuesta fue asegurar que “lamentamos profundamente su marcha, y yo especialmente como secretaria general”, un cargo que Cascos ocupó casi una década. Incluso resaltó el “gran papel” que realizó el histórico dirigente durante el tiempo que duró su mandato. Pero, dicho esto, dejó claro que la dirección nacional, liderada por Mariano Rajoy no moverá un dedo para que el ex ministro reconsidere su postura y vuelva a redil. Lo que sí hizo el líder del PP es apelar ante los miembros del Comité "al sentido común y a la sensatez".
Ovidio y Rudi piden 'pasar página'
Cospedal dijo que a partir de ahora el partido se volcará y “dará todo su apoyo a los candidatos hasta ahora designados”, entre ellos el de Asturias, que era el que deseaba la dirección regional que encabeza Ovidio Sánchez, quien acudió este lunes a la reunión del Comité Ejecutivo del PP. Precisamente, el líder asturiano tomó la palabra para dar a entender que los ciudadanos olvidarán pronto el abandono de Cascos y no causará daño al PP en Asturias. Por su parte, la aragonesa Luisa Fernanda Rudí, lamentó el espectáculo que se ha dado con el cruce de acusaciones y exigió "mayor cordura" a sus compañeros asturianos.
Pero la indiferencia hacía el ex ‘general secretario’ del PP que quiso demostra Cospedal fue tal que ni siquiera quiso valorar la posibilidad de que Cascos se presente a las elecciones con un nuevo partido o si podría hacer ‘daño’ electoral al PP en ese supuesto. Y hasta tuvo que aguantar la risa cuando se le preguntó si entre ambos había “alguna rencilla” personal. “No hay ninguna rencillas ni nada por el estilo, se lo aseguro”, sentenció. También negó conversación alguna entre Cascos y Rajoy para anunciarle que no sería candidato.
Lo que no se esperaba fue que en un momento dado, cuando se le insistió sobre las quejas de Cascos de que no habían sido atendidas sus reiteradas denuncias por los insultos que dice haber recibido por parte de dirigentes regionales asturianos, Cospedal sorprendiera al revelar que el Comité de Derechos y Garantías del partido hace tiempo que abrió “diligencias informativas” para valorar los “comportamientos por ambas partes”, es decir, tanto por parte de los ‘casquistas’ como por parte “de la propia dirección regional y la del PP de Gijón”. No obstante, matizó que esto no significaba que se esté investigando “contra nadie”. Cascos se fue del PP con la creencia de que éste órgano no había abierto ningún acción al respecto.
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