La situación evidencia una discrepancia que puede hacer recapacitar al partido sobre la idoneidad del actual alcalde barcelonés como candidato
El alcalde de Barcelona, Jordi Hereu, ha puntualizado este lunes que no gobernará con CiU tras las elecciones municipales, y que se ciñe sólo a opciones de progreso con ICV-EUiA y ERC, han explicado a Europa Press fuentes del entorno del alcalde. En medio día, pues, ha tenido ocasión de afirmar una cosa -en el foro Primer Plana había dicho que si no podía gobernar Barcelona con fuerzas progresistas, cabía la posibilidad de hacerlo con CiU- y decir justamente todo lo contrario.
En la discrepancia con el partido y la, con toda seguridad, forzada rectificación del Alcalde, además, se puede entrever una clave de desconfianza de la formación hacia la figura del edil. Hasta ahora, el PSC ha asegurado que su candidato era Jordi Hereu, pero con la boca algo pequeña. Desde luego, situaciones como la producida hoy pueden producir un mar de fondo de imprevisibles consecuencias. Sobre todo, claro, si se van repitiendo.
El primer edil de la capital catalana había dicho este lunes por la mañana en una conferencia que si no se pudiese dar un gobierno con mayoría de progreso tras las municipales de mayo del 2011, no descarta otros escenarios, ha dicho al preguntársele por si reeditaría un gobierno en minoría y si apostaría por una sociovergencia. El entorno del alcalde ha insistido en que no está sobre la mesa la posibilidad de una sociovergencia, y ha defendido que el PSC y CiU representan modelos antagónicos.
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