Tan sólo el jueves declaró persona no grata al delegado del Banco Mundial (BM) en esta capital, pero ahora aclaró que lo que ha hecho su gobierno es ''expulsar al representante del BM''.
El afectado, Eduardo Somensatto, viajó a Washington la semana pasada a una reunión ordinaria del BM.
La decisión se produjo porque el BM no entregó un préstamo de 100 millones de dólares en el 2005 (cuando Correa era ministro de Economía), aunque el país había cumplido con todos los requisitos. El banco argumentó que no lo hacía porque Ecuador modificó una ley que destinaba el 70% de un fondo petrolero a la recompra de deuda externa.
"Por haber reformado una ley nacional a un país soberano le retienen el cheque, por portarse mal'', señaló Correa.
Manifestó que ''se equivocaron, al menos con este gobierno esa burocracia se equivocó, no somos colonia de nadie, esa burocracia internacional majadera, incompetente y deshonesta tendrá que respetar a nuestro país así que hemos expulsado al representante del BM''.
Añadió que ''nos reservamos el derecho de iniciar las acciones legales pertinentes por los daños y perjuicio causados al país (por el banco) , además nos reservamos el derecho de calificar como ilegal las deudas que tenemos con el BM, de tal forma que pagaremos en función de lo que consideremos conveniente para el país y no para esta burocracia nefasta para nuestra Patria''.
Consultado sobre si cree que la delegación del BM quiere irse de Ecuador, el mandatario respondió: ''que se vayan''.
Esa institución había dicho el jueves que estudia las implicaciones de la decisión de Ecuador al tiempo que reiteró su voluntad de mantener el diálogo al más alto nivel.
La decisión no implica el cierre de la oficina del BM en esta ciudad.
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