Más de 2.600 mujeres tienen orden de protección y 580 cuentan con protección directa en Castilla y León

Más de 2.600 mujeres tienen orden de protección policial y 580 protección directa en Castilla y León, comunidad que ha recibido un 35 por ciento más de denuncias en el primer semestre de este año con respecto al mismo periodo de 2013.   

Así lo ha trasladado este martes la consejera de Familia, Milagros Marcos, quien tras la constitución del Comité Permanente del Observatorio de Castilla y León, ha comparecido ante los medios de comunicación, momento en el que ha recordado que son dos las mujeres fallecidas víctimas de la violencia de género en la Comunidad en lo que va de año.   

En la Comunidad son 2.640 las mujeres con órdenes de protección policial y 580 con protección directa, según Marcos, quien ha recordado los trabajos realizados directamente con la Policía para desarrollar los planes de seguridad, lo que se ha traducido en una reducción "sustancial" del número de personas fallecidas que tenían protección policial: del 24 por ciento de 2007 al cuatro por ciento del pasado año.   

Esa disminución vinculada a la protección policial ha llevado a la Consejería, según su titular, a dar "un paso más" y avanzar en este terreno antes de que se produzca la propia denuncia.   

Asimismo, en el primer semestre del año, en Castilla y León se han recibido 2.526 denuncias frente a las 1.858 de 2013, lo que supone un 35,95 por ciento más mientras que, en lo referente a las renuncias al proceso, el porcentaje ha crecido un 108,44 por ciento --de 225 de 2013 a las 469 de los seis primeros meses de este año--.   

Marcos ha rehusado vincular el incremento de denuncias con un "mejor o peor" funcionamiento del sistema y ha incidido en que la importancia radica en que quienes necesiten la atención acudan al lugar más cercano para recibir ayuda profesional y den el paso de abandonar al agresor. "Es importante que las mujeres víctimas lo denuncien, queremos acompañarlas en ese paso".

Guía de información y sensibilización   

Milagros Marcos ha constituido el Comité Permanente del Observatorio de Castilla y León, que cuenta con tres secciones diferentes: género, convivencia escolar y agresiones al personal sanitario; hoy, además del Permanente, se ha constituido la de género, marco en el que se ha explicado el Objetivo Violencia Cero y se han presentado los resultados del grupo de trabajo de sensibilización e información.   

Fruto de esta labor se ha presentado una guía informativa y de sensibilización que trata de ayudar a las víctimas y a su entorno a identificar situaciones de violencia de género y que, colgada en la web de la Junta, explica mediante el formato de pregunta-respuesta qué es la violencia de género, quiénes son las víctimas, las distintas formas de ejercer la violencia de género (psicológica, física, sexual, económica, cultural, laboral...) y el modo de prestarles ayuda y de identificar estas situaciones.   

Esta guía, en cuya elaboración han participado expertos de la Universidad de Valladolid, el Consejo de la Juventud, la Casa Escuela Santiago 1 de Salamanca, la Asociación Mujeres en Igualdad de Palencia, Cáritas Valladolid, Diputación de Valladolid o Consejería de Educación, posibilitará que los ciudadanos de la Comunidad actúen "de forma discreta" y "siempre ayudando a las víctimas", ha insistido la consejera de Familia antes de referirse a la campaña 'CyL Reacciona', puesta en marcha en base a las conclusiones elaboradas por el grupo de trabajo y que se han centrado muy especialmente en los jóvenes.   

En este ámbito de acción se ubican actividades puestas en marcha como un concurso de 'selfies' en Twitter, talleres en campamentos y en el marco de 'Conciliamos' o la introducción de cuñas en programas radiofónicas juveniles que persiguen, según Milagros Marcos, llegar a los jóvenes cuyo grado de machismo "no es el que se quiere" en la Comunidad.   

En este sentido, ha puesto de manifiesto cómo los datos nacionales, muy similares a los regionales, muestran que entre el 14 y el 23 por ciento de los chicos entrevistados reconoce haber sufrido conductas violentas y un 44 por ciento confiesa agredir "a quien le quita lo suyo". Además, el 37,9 por ciento cree correcto pegar a alguien que te agrede y mantener en casa lo que allí ocurre por considerar que no es asunto de nadie.