Los comerciantes de León recurrirán la calificación de ciudad de gran afluencia turística que permite abrir 16 domingos

Las asociaciones de comerciantes de León han anunciado este martes que recurrirán la calificación de León como ciudad de gran afluencia turística porque consideran que la capital no registra anualmente más de 600.000 pernoctaciones, como recoge la normativa aprobada el 4 de julio por el Ejecutivo nacional.   

Esta ley califica de zona de gran afluencia turística a los núcleos de población que superan los 100.000 habitantes y que registran anualmente más de 600.000 pernoctaciones. Esta consideración permite que los establecimientos puedan abrir hasta 16 domingos al año.   

Los comerciantes leoneses han mantenido este martes un encuentro con los parlamentarios del PP Luis Aznar y Arancha Miguélez a quienes han transmitido su preocupación ante esta legislación que puede suponer "la puntilla" al comercio de la capital que se encuentra "muy debilitado".   

Además, han criticado que esta decisión se haya tomado por parte del Gobierno de forma "unilateral" y sin avisar, y que beneficia a las grandes superficies en detrimento del pequeño comercio.   

En este sentido, Javier Menéndez, portavoz de las distintas asociaciones de comerciantes, ha manifestado que este colectivo "cuestiona" las cifras que califican a León como ciudad de gran afluencia turística porque ha anunciado que va a "rebatirlas".   

Por su parte, los parlamentarios populares han asegurado su "apoyo" a esta reclamación. "El PP apoyará esta reclamación y trasladaremos esta cuestión al Ministerio para hacerla valer", ha asegurado Aznar.

En este sentido, el parlamentario ha agregado que no se trata de un asunto "complicado", sino de "simplemente poner en valor las cifras reales de León".

Limitaciones a la ley   

Por otro lado, los comerciantes han propuesto también otras medidas para que esta normativa perjudique menos a los pequeños establecimientos de la ciudad si finalmente los datos no les avalan.   

En este sentido, han propuesto que la normativa tenga una limitación geográfica y una limitación temporal, ambos aspectos recogidos en la Ley. Estas limitaciones, una vez acordadas, deben recibir el visto bueno de la Junta de Castilla y León.   

El colectivo ha propuesto que la zona de gran afluencia turística no afecte al conjunto de la ciudad, sino al casco histórico vinculado a los Bienes de Interés Cultural que se ubican en este espacio, uno de los más visitados de León.   

En cuanto a la limitación temporal, los comerciantes creen que las épocas de gran afluencia de turistas son Navidad, Semana Santa, la festividad de San Froilán, en octubre, y la celebración de Purple Weekend, en diciembre, y que la norma debería ceñirse a ellas.

En este aspecto, los parlamentarios han expresado también su compromiso para que la Junta recoja esta petición.