El juicio, visto para sentencia tras reconocer el procesado los hechos
Las partes acuerdan 24 años y 9 meses de cárcel para el hombre que mató a su mujer en Villoldo
miércoles 13 de noviembre de 2013, 16:21h
El juicio por el conocido como 'Crimen de Villoldo', que ha tenido lugar
este miércoles en la Audiencia Provincial de Palencia, ha quedado visto
para sentencia después de que el acusado haya reconocido el asesinato
de su mujer en su casa y el intento de asesinato de una de sus hijas.
Las partes han llegado a un acuerdo por el cual se ha fijado una condena de 24 años y 9 meses de cárcel para el procesado, lo que significa una reducción respecto a los casi 33 años que desde el Ministerio Fiscal se pidieron en un primer momento.
El acusado, J.S.G. de 43 años, ha sido condenado como autor de los delitos de asesinato, homicidio en grado de tentativa y amenazas así como de incumplimiento de la orden de alejamiento en un juicio donde ha asegurado la noche del suceso no acudió a la casa de su esposa, en Villoldo, con la intención de matarla. De igual forma ha señalado que las acusaciones vertidas hacia él por amenazas "son falsas".
Recordatorio de los hechos
Fue a finales de agosto del año 2010 cuando el procesado recibió una orden de alejamiento tras denunciar su mujer amenazas de muerte que se dieron en una acalorada discusión que habían mantenido y donde el acusado habría llegado a utilizar un arma blanca en sus amenazas.
En la madrugada del 9 de septiembre de 2010 el inculpado acudió a la casa donde se encontraban su mujer y sus dos hijas gemelas, lo que supone un incumplimiento de la orden de alejamiento, donde mató a cuchilladas a la mujer con un cuchillo que cogió de la propia cocina del domicilio.
El hombre asestó también varias cuchilladas a una de sus hijas quien acudía a ayudar a auxiliar a su madre ante los gritos de ésta, momento en que el arma se rompió y las hijas del acusado aprovecharon para encerrarse en otra habitación.
El hombre abandonó la casa tras lo cual intentó quitarse la vida para finalmente, al no conseguirlo, llamar al 062 donde confesó el delito, tras lo que fue detenido.