Pérez
Rubalcaba ganó la partida: la Conferencia Política del PSOE no ha quedado
monopolizada por el debate sobre las primarias, que se celebrarán finalmente,
tal y como quería el líder socialista, entre julio y noviembre de 2014. Pero,
además, ha incluido una enmienda en la Ponencia Marco por la que se rebajan los
avales necesarios para presentar candidatura del 10% actual al 5%. Esto
significa, sencillamente, que los aspirantes van a necesitar sólo la firma
previa de 10.000 militantes, en lugar de los 20.000 previstos en los estatutos.
Además, se limitarán los avales que cada aspirante pueda recoger, de forma que
no ocurra lo que pasó en Andalucía con Susana Díaz.
Se
trató de una maniobra de última hora del 'aparato' de Ferraz, apiñado en torno
a
Alfredo Pérez Rubalcaba, para calmar la tensión con la que los más críticos llegaron
a la apertura de la
Conferencia Política del PSOE que se celebra este fin de
semana en Madrid. Oficialmente, no se quería hablar de primarias -no, al menos
de nombres- y mucho menos de organización territorial. Pero era evidente que
ambas cuestiones iban a saltar en los debates de la Conferencia y la Ejecutiva
Federal decidió dar el salto y adelantar acontecimientos.
A
primera hora de la tarde de este sábado, la dirección federal socialista formulaba
unas propuestas incuestionables: primero, rebajar a la mitad el número de
avales necesarios para presentarse a las elecciones primarias para candidatos
socialistas a la Presidencia del Gobierno; segundo, mantenerse en la línea de
abrir las primarias a toda la ciudadanía; tercero, limitar el número de avales
que cada uno de los candidatos puede recoger, y cuarto, y más importante, mantener
el calendario proyectado de primarias, que no se celebrarán hasta después de las
elecciones europeas de mayo de 2014, y más previsiblemente en octubre de ese
año.
Respecto
al primer punto, a partir de esta Conferencia el porcentaje de apoyos
requeridos para competir por el liderazgo y ser el cabeza de cartel a la
Moncloa pasará del 10% actual a sólo el 5%, o, lo que es lo mismo, de 20.000
avales se pasará a sólo 10.000 firmas.
El
segundo punto mantiene la necesidad de que la ciudadanía en su conjunto pueda participar
para elegir al candidato socialista a la Moncloa, no dejando tal elección sólo
en manos de los militantes. Esta decisión requiere de tiempo para establecer
los mecanismos de participación necesarios, de tal manera que, según indicaban
a
Diariocrítico medios de la dirección socialista, las primarias necesitarían
al menos de seis meses para poderse preparar con garantías de participación.
En
tercer lugar, la dirección federal proponía limitar el número de avales que
cada uno de los candidatos pueda recoger, de tal forma que no se den situaciones
de abuso, como la que protagonizó la propia presidenta andaluza y próxima
lideresa del PSOE andaluz,
Susana Díaz, que acaparó los avales e impidió de
esta forma la presentación de otras candidaturas. "Si quieren primarias
abiertas, que así sea, pero con juego limpio", dicen determinadas voces.
Y
en cuanto lugar, la fecha. Rubalcaba ha triunfado: ha conseguido que se obvie
este debate en las discusiones de la Conferencia Política y que quede encorsetado
al Comité Federal, que es el órgano que debe decidir. Pero el 'aparato'
socialista lo tiene claro: la fecha de celebración será en el otoño de 2014, o
en todo caso después de las elecciones europeas de mayo de ese año y no antes,
como quieren el castellano-manchego
Emiliano García-Page y el madrileño
Tomás
Gómez.
Estrategia
política: elecciones a finales de 2015 o primeros de 2016Según
medios de la dirección socialista, el 'aparato' del PSOE juega con que Mariano
Rajoy va a apurar al máximo su mandato: va a presentar unos Presupuestos
expansionistas para 2016, "porque para 2015 no tiene condiciones económicas
objetivas para hacerlo", por lo que intentará apurar al máximo su mandato y no
convocar elecciones "probablemente" hasta enero de 2016, que es la última fecha
que le permite la ley.
Jugando
con ese calendario, Rubalcaba cree que con primarias en octubre de 2014 hay
tiempo más que suficiente para hallar un candidato y hacer el marketing
adecuado para determinar un liderazgo.
Nadie
se atreve ahora a hablar de nombres, pero casi todos los consultados hablan de
al menos dos 'fijos': el vasco
Patxi López y la catalana
Carme Chacón. Del
madrileño Tomás Gómez, del manchego Emiliano García-Page y de la andaluza
Susana Díaz dicen que "aún tienen que revalidarse en sus respectivas
comunidades; es decir, que aún tienen que ganar las elecciones autonómicas. Y
con respecto a
Eduardo Madina, muy pocos confían en su candidatura en
solitario, pero... la decisión no la ha tomado ni propio Madina.
La
gran incógnita sigue siendo: ¿se presentará Rubalcaba? Un dirigente socialista
que conoce muy bien al actual secretario general del PSOE lo tiene claro: "Rubalcaba
tomará la decisión solamente después de celebradas las elecciones europeas, y
en función de los resultados que obtenga el Partido Socialista".