"Ibarrola en libertad" en el Hay Festival de Segovia
lunes 23 de septiembre de 2013, 13:40h
El artista Agustín Ibarrola ha advertido de
la "tremenda presión" que existe por parte del nacionalismo vasco para
que España se convierta en el "otro nacionalismo" que se opone a él, lo
que en su opinión crea situaciones de ignorancia y represión.
El pintor y escultor vasco, quien ha presentado este lunes en
Segovia su exposición 'Ibarrola en libertad', que se exhibirá en el
marco del Hay Festival, ha incidido en que España se entiende desde la
óptica nacionalista como otro "nacionalismo antinacionalismo".
Ibarrola ha reconocido que como vasco sigue teniendo mucha
carencia de relaciones con el resto de comunidades autónomas y ha
recordado su deseo por conectar al país a través de la cultura, una
ambición que en los años 50 le llevó a viajar junto con el poeta Blas de
Otero y el pintor Isamel Fidalgo a Castilla, entrando por León en
ferrocarril, medio de transporte en el que llegaban los trabajadores de
toda España al mundo industrial.
En esa época, ha relatado, sabían de oídas que en algunos lugares
del país había buenos artistas y comenzó entonces un esfuerzo por
relacionarse con el mundo de la cultura, que estaba "absolutamente
desarticulado" en el conjunto nacional salvo en el ámbito oficial, donde
"la gente progre e inquieta de la época no tenía nada que aprender ni
decir".
Ibarrola, fundador del Equipo 57, agrupación artística de carácter
neorracionalista y experimental que revolucionó el clima de las artes
plásticas españolas en los 50 y los 60, ha señalado que entre ellos
circulaba entonces la idea de que España permanecía "invertebrada".
"No sabíamos qué era, fue un imperio, pasó a ser una España que en
realidad estaba hecha muy por arriba, pero que no había vivido los
procesos democráticos para convertir al país en un estado de derecho,
con participación de todas las gentes diversas y todas las
manifestaciones culturales tan ricas y amplias que producía el conjunto
de los españoles", ha subrayado.
Para este artista, también fundador de la plataforma ¡Basta Ya! y
del Foro de Ermua y muy implicado en la lucha contra el terrorismo de
ETA en el País Vasco, esto sigue siendo un "problema" en España, a cuyos
ciudadanos se acusa de ser también nacionalistas contrarios al
movimiento separatista vasco.
El autor ha aludido asimismo a las amenazas que los artistas
sufren en la actualidad a la hora de expresar su arte, que según ha
advertido ha pasado a ser una industria muy productiva para que muchas
ciudades se conviertan en núcleos de desarrollo económico a través del
turismo, del propio prestigio de la ciudad que necesita ser ampliada, no
sólo en forma de museos sino también de construcciones, con muchos
servicios.
Ibarrola, conocido por sus decoraciones pictóricas en árboles,
como el 'Bosque de Oma' o el 'Bosque Encantado' de Salamanca, ha
apuntado como otra de las amenazas el que las instituciones
"privilegien" a autores "momificados" que pintan igual a los primeros
momentos en que tuvieron éxito y forjaron un nombre.
"En una época de los grandes cambios acelerados resulta que exigen
que el artista tenga marca, o de país o individual, y que no se
produzcan cambios sustanciales en su entidad personal. ¿Cómo es posible
pedir al creador que no se mueva de su marca mientras el mundo cambia a
toda velocidad?", se ha preguntado.
La exposición
'Ibarrola en libertad', que podrá verse del 27 de septiembre al 7
de octubre en la Huerta de la calle del Marqués de Villena, en una finca
de 4.000 metros del barrio de San Marcos, reúne más de 30 piezas, la
mayoría esculturas de traviesas de vías férreas pintadas y talladas.
En la muestra se incluyen tres obras monumentales que forman parte
de un conjunto homenaje al municipio de Reinosa con el que el artista
pretende unir el área industrial con la parte histórica. Según ha
destacado el propio Ibarrola, por primera vez en Segovia, este pueblo
cántabro significa mucho porque ha sabido conservar la vieja industria
siderometalúrgica "contra viento y marea".
En cuanto a las traviesas, el escultor ha explicado que, al
ponerlas en pie y ver las huellas de chapas y tornillos para atar la
madera a los carriles, se dio cuenta de que un "tótem humano" le miraba.
Desde entonces, ha indicado, ha trabajado mucho con estos elementos,
que denotan además el principio de su relación con los materiales y las
personas, como la de aquel viaje en ferrocarril a León.
La compañía Renfe, muy vinculada al artista, le donó las pesadas
traviesas, que según ha asegurado le sitúan en el terreno de la historia
del arte de todos los tiempos en cualquier lugar de la Tierra.
Se debe, ha dicho, al trabajo en materiales que ya han sido usados
para mil cosas frente a las obras de los grandes maestros, en las que
tuvo mucha importancia emplear el material más rico posible y difícil de
encontrar para valorar, además de como obra de arte, los objetos que el
hombre ha estado creando durante miles de años en la naturaleza y que
refleja el mundo que él ha habitado.
"El creador siempre ha estado respondiendo a su momento", ha
apostillado Ibarrola, partidario del arte de vanguardia como vía máxima
de expresión de libertad.
Félix Ortiz, organizador y productor de la exposición, quien ha
acompañado al artista en la presentación de la muestra, ha informado de
que ésta abrirá sus puertas de 12.00 a 14.00 horas y de 17.00 a 20.00
horas. Podrá verse de forma gratuita.
La inauguración tendrá lugar este viernes a las 18.30 horas con
una debate sobre la escultura vasca en la Posguerra y los tres artistas
pilares de la misma: Ibarrola, Chillida y Oteiza. Intervendrán la
galerista Elvira González, el escritor Carlos Martínez Gorriarán e
Ibarrola.