Ana Pastor: "Hay que priorizar en época de crisis las infraestructuras que realmente vertebran y aportan valor al territorio"

La ministra de Fomento, Ana Pastor, ha apostado este jueves en Burgos por priorizar, en época de crisis, las infraestructuras que vertebran el territorio, durante la inauguración del tramo Quintanilla Vivar-Quintanaortuño de la A-73 Burgos-Aguilar de Campoo (Palencia).

En este sentido, ha destacado la "importancia" del vial que se ha puesto en marcha para mejorar la circulación en las proximidades de la capital burgalesa y ofrecer una mayor seguridad vial en la zona.

"Es una obra que es muy importante y aunque estamos en tiempos de crisis hay que abordar aquellas infraestructuras que realmente vertebran el territorio y aportan valor", ha aseverado Pastor, antes de recordar que la puesta en servicio de este tramo había sido reclamada en varias ocasiones por la Junta de Castilla y León y el Ayuntamiento de Burgos.

El tramo inaugurado, por el que se prevé una circulación diaria de entre 8.000 y 12.000 vehículos posee una superficie cercana a los nueve kilómetros de longitud y ha contado con un presupuesto superior a los 48 millones de euros, cofinanciado con fondos europeos, de los que más de 44 millones de euros se han correspondido a la propia obra, 2,07 millones de euros se han abonado en expropiaciones, 1,5 millones de euros se han destinado a labores de control y vigilancia durante el periodo de las intervenciones y 280.000 euros correspondieron a la redacción del proyecto.

En cuando a la continuidad de la A-73, Pastor ha recordado que existen algunos proyectos de otros tramos ya terminados, aunque ha señalado que el resto de las intervenciones se ejecutarán "a medida que se vayan teniendo disponibilidades presupuestarias".

Variante de Aranda

Previo a la inauguración del primer tramo de la A-73, la titular de Fomento ha visitado las obras del tramo de la variante de la localidad burgalesa de Aranda de Duero de la Autovía del Duero A-11, que se ha planificado como alternativa a la carretera N-122 de Zaragoza a Portugal y se espera que capte una parte importante del tráfico de largo y medio recorrido de los más de 8.000 vehículos diarios que circulan por la travesía arandina, así como por las de los municipios de Fresnillo de Dueñas y Castrillo de la Vega.

Se trata de un tramo de autovía de 13,7 kilómetros de longitud dotado con dos calzadas de dos calzadas de 3,5 metros de anchura, arcenes exteriores de 2,5 metros e interiores de un metro, separadas por una mediana de diez metros.

Su diseño ha tenido en cuenta la orografía del terreno y se ha intentado afectar en la menor medida posible los viñedos y regadíos existentes en la zona, así como bordear las masas arbóreas.

Además, para su integración ambiental la obra cuenta con cinco pasos de fauna, plantaciones e hidrosiembra en taludes, enlaces y medianas y seguimiento arqueológico.

Para los usuarios de la autovía, la inauguración de estas obras, cuyo presupuesto alcanza los 61,2 millones de euros, supondrá una mejora de la seguridad vial y de la comodidad de conducción, así como un ahorro de tiempo en su recorrido.

Asimismo, supondrá una mejora de la calidad del medio ambiente del término municipal de Aranda de Duero, con una población cercana a los 35.000 habitantes, al suponer una notable reducción de ruidos y contaminación.