Ellos no lo van a arreglar

El pasado viernes, a las siete de la tarde, mas de 500 personas abarrotaban el Salón principal del Hotel Felipe IV de Valladolid, en la presentación oficial de SCD, Sociedad Civil y Democracia en Castilla y León, un nuevo movimiento político en nuestra Comunidad Autónoma.

Ante un día tan lluvioso y frio, tenía miedo a la presentación. Esta tierra es un señorío del Partido Popular desde hace mas de veinte años y sin embargo, al entrar en el salón, se disiparon todos mis temores, en el salón vi muchos rostros que jamás pensé encontrar allí.

La verdad es que no dijimos nada nuevo que no llevemos repitiendo hasta la saciedad desde hace muchos meses, pero si creo que empezamos a decir las cosas que nadie dice en alto y en público.

Para algunos, eso de decir en alto lo que nadie dice, resulta temerario, a otros simplemente nos parece necesario. Además, creo que vivir con valentía siempre ha sido difícil, incluso peligroso, pero desde luego garantiza una vida intensa. Vivir la vida con miedo, te garantiza, quizá, una vida mas cómoda, pero también, seguro, mas aburrida

Hablamos allí de la profunda crisis institucional que azota a España, empezando por la Jefatura del Estado, y de la pérdida total de prestigio de la clase política en general, así como de la falta de confianza de la ciudadanía en sus representantes y en las soluciones que estos proponen.

Las ultimas noticias sobre las escuchas de políticos a políticos y el conocimiento de las ultimas andanzas notariales de Bárcenas, no hacen sino incrementar la desafección ciudadana hacia sus políticos, mientras el Gobierno y la oposición pasean su obscena inconsciencia en la tribuna aristocrática del Parlamento español.

Aunque, pensándolo bien, deberíamos pedirles que se sigan espiando. Así, al menos, sabremos de verdad toda la porquería que esconden tras sus aparentes modales democráticos.

Y claro, hablamos también de Castilla y León y de la cruda realidad que  afecta, hoy ya en profundidad, a los castellanos y leoneses.

Queríamos decirle a la gente que nos escuchaba, que llevamos mas de tres años perdiendo población  y que seguimos sin encontrar un modelo cierto y efectivo de recuperar a los miles de personas que nos abandonan día a día en busca de una vida mas digna.

Queríamos que escuchasen, que a pesar de esta emigración regional, nuestra tasa de desempleo supera ya el 20 por ciento y el paro regional ha alcanzado las 246.000 personas.
 
Que la deuda pública de la Junta se ha disparado por encima de los 6.000 millones de euros y que sus intereses y amortización nos van a costar este año 882 millones de euros.

Y que de nuevo, como casi siempre, la Sanidad y la Educación han visto reducidos sustancialmente sus asignaciones presupuestarias, mientras nuestros representantes pasean sus debates por un edificio de construcción excesiva y coste muy elevado. Aunque cuando hablamos de costes elevados, construcciones excesivas y compromisos dudosos, quizá debamos mirar primero a Burgos y luego, a la famosa "perla negra" del Gobierno autonómico

A ellos y a ustedes que tienen la paciencia de leerme, les digo alto y claro también, que todos estos problemas, ellos no los van a arreglar. Nunca el que ha generado un problema y ha permitido que ese problema se enquiste, ha sido capaz de encontrar la solución al mismo.

Dijimos finalmente y ahora también lo decimos, que nosotros entramos a la política, no para ser políticos, sino para cambiar la forma de entender la política. Que vamos a entrar en la política regional preguntando y si las respuestas que recibimos no son adecuadas, los ciudadanos lo sabrán de inmediato y lo podrán valorar. Y si hay que ir mas allá, y los ciudadanos lo piden, iremos.