Goyo Chamorro: "El ex presidente de Paradores instauró en San Andrés del Rabanedo el lema 'hagamos lo que debamos aunque debamos lo que hagamos'"

Todavía resuenan en la opinión púbica las declaraciones del ministro de Industria, Energía y Turismo, José Manuel Soria, arremetiendo contra la gestión al frente de Paradores de su anterior presidente, el socialista Miguel Martínez, al que acusó directamente de despilfarro. "Disponía, entre otros privilegios, de dos viviendas, seis coches oficiales de alta gama y doce tarjetas de crédito, todo ello pagado por Paradores a su disposición", llegó a denunciar.
 
Lo cierto es que en 2008, Zapatero puso al frente de la empresa pública a Martínez, quien al llegar a la Presidencia de Paradores, a mediados de 2008, se encontró con un beneficio de 18,24 millones y unos ingresos de 274,19 millones. Sin embargo, Grant Thornton, la firma que auditó las cuentas de la empresa pública, advirtió de un "agujero" contable de 80 millones de euros al cierre del ejercicio de 2010.
 
 El PP ha denunciado que Paradores era rentable hasta la llegada a la Presidencia de Miguel Martínez, sin experiencia en el sector turístico y hasta entonces alcalde del municipio leonés de San Andrés del Rabanedo. Lo cierto es que tras gobernar el municipio leonés durante 15 años y tres más su sucesora, María Eugenia Gancedo, el actual alcalde, Goyo Chamorro, se enfrenta a otro 'socavón' de 78 millones de euros de deuda.
 
Chamorro, del PP, destaca la difícil situación del Ayuntamiento de San Andrés del Rabanedo donde las facturas se amontonan en los cajones, una situación que le ha obligado a doptar duras medidas, como la aplicación de un ERE entre sus empleados.
 
-¿Qué se encontró el primer día de legislatura?
- Decenas de proveedores a los que el Ayuntamiento adeudaba ingentes cantidades de dinero desde hacía muchísimos años, a los que no se les pagaba ni se les daba ninguna solución. Lo primero que hice fue escucharlos. Me asombró la cantidad de ellos que había, me esperaban hasta en las escaleras... Y me consternó la imposibilidad material para hacer frente a aquellas deudas. Era verdaderamente increíble. Por ejemplo, la empresa de servicios Urbaser no había cobrado un céntimo desde el año 2006. En consecuencia, me encontré también una cantidad impresionante de procedimientos judiciales por impago. Y lo más asombroso: la deuda alcanzaba los 78 millones de euros.
 
- ¿Cómo se alcanzó tamaña deuda que convirtió a San Andrés del Rabanedo en el quinto municipio más endeudado de España?
 
- La deuda alcanzaba los 78 millones de euros en un presupuesto que en los mejores años había llegado a los 24 millones, si bien, realmente en los presupuestos se engordaban las partidas. Se engordaban hasta 10 millones para alcanzar la cifra de ingresos totalmente irreal de 34 millones. En consecuencia, se han ido produciendo desfases de 10 millones de euros año tras año invariablemente. De ahí que el año en que entra en el Ayuntamiento María Eugenia Gancedo la deuda suma 40 millones y cuando tres años después deja el gobierno alcanza los 78 millones.
 
- ¿Y de qué partidas proviene?
- De las empresas de servicios y del personal. Cuando llegamos al gobierno había 12 millones de euros de presupuesto en personal. A día de hoy hemos bajado a nueve y todavía debemos cumplir el plan de ajuste en 7 millones, de ahí el ERE actual. Es una solución que no le gusta a nadie y que yo tampoco acepto de buen grado, pero es una decisión absolutamente responsable. Si no la adoptamos nos van a intervenir y el daño va a ser peor. En cuanto a los servicios, había contratos con empresas insostenibles, de ahí la gestión directa. Es mucho más difícil para nosotros, pero tenemos que afrontarlo porque no podemos pagar. Por ejemplo, la empresa de mantenimiento eléctrico desde el año 96 nos cobraba en la actualidad 36.000 euros mensuales; hoy pagamos 6.000 euros por el mismo servicio. Hay que gestionar.
 
- ¿A qué obedece que la plantilla municipal esté sobredimensionada?
- El ayuntamiento contaba con interinos de más de 24 años, nunca se había llevado a cabo la reasignación de servicios... Es preciso consolidar los puestos de trabajo y crear la RPT (Relación de Puestos de Trabajo) para evitar un incremento de plantilla sin control. Es un proceso arduo y difícil pero lo estamos consiguiendo.
 
- ¿Cuál es la postura de la oposición ante las medidas que está adoptando?
- Está en contra y lo entiendo porque yo también lo estoy pero no hacerlo sería gobernar de cara a la galería y como se ha hecho todos estos años. Miguel Martínez instauró en el ayuntamiento el lema: "Hagamos lo que debamos aunque debamos lo que hagamos". Se hacían obras innecesarias que además no se pagaban. Yo creo que es más honrado decirle a los vecinos que vamos a hacer lo que podemos pagar. Asumo el desgaste que supone enfrentar esta situación pero creo que los ciudadanos sabrán entender que es lo honesto y lo correcto.
 
- ¿Y qué postura defiende el anterior equipo de gobierno del municipio? ¿Asume responsabilidades?
- En absoluto. Poco antes de las elecciones municipales, el PSOE aprobó en el pleno sin consenso sindical de ningún tipo una RPT que suponía casi 70 despidos y una bajada salarial del 30%. Nosotros hemos disminuido el número de empleados mediante la no renovación de contratos y a través de la regularización conforme a los procedimientos laborales legales para cumplir los criterios del convergencia del plan de ajuste.
 
- ¿Cuál es la receta para sortear la intervención?
- La receta engloba tres puntos: el capítulo uno de personal, el capítulo de servicios y una absoluta transparencia: no prometer lo que no se va a cumplir; decir las cosas claras.
 
- ¿Se ha acogido al mecanismo de financiación del ICO (Instituto de Crédito Oficial) para atender a las obligaciones pendientes de pago?
- Sí, pero aún así todavía debemos en un porcentaje elevadísimo en subvenciones reconocidas y no pagadas casi 26 millones de euros. El crédito ICO nos ha venido muy bien. De los 78 millones de euros de deuda hemos incluido 48 millones. Pero obliga a hacer frente a los intereses, que son cantidades importantísimas. Habría que flexibilizar las condiciones porque no todos debemos lo mismo y el pago de los intereses nos estrangula.
 
- ¿Entienden los vecinos las duras medidas aplicadas?

- Creo que sí. Los vecinos son conscientes del desastre y están valorando que aunque son medidas dolorosas hacemos lo que hay que hacer. O gestionamos o cerramos. El ayuntamiento está para dar servicio a los ciudadanos.
 
- ¿Se ve luz al final del túnel?
- Sí. Primero tenemos que encauzar la situación para más tarde intentar sacar la cabeza a flote... Nos espera una década de sacrificios pero San Andrés del Rabanedo tiene futuro y es ahora cuando lo estamos construyendo. Por eso tengo fuerzas y ánimo para trabajar día a día con tesón, perseverancia y entusiasmo.