Sacristán dice que el emprendedurismo es una "asignaturas pendiente" de la universidad, la sociedad y la empresa

El rector de la Universidad de Valladolid (UVA), Marcos Sacristán, ha destacado este jueves en Palencia que el emprendedurismo es una de las asignaturas pendientes de la Universidad, así como también de la sociedad y de las propias empresas.

Sacristán, que se encontraba en la capital palentina, sede de la primera Universidad de España, para participar en el acto de inauguración del curso universitario en Castilla y León, el cual ha tenido lugar en la Catedral, ha expresado durante su discurso que para resolver los problemas a los que se enfrenta la universidad es necesaria "una reflexión conjunta con otras universidades y con el resto de agentes de la sociedad", de modo que la lleve a adaptarse a una plena internacionalización, informa Ep.

Así, ha incidido en que "no es solo la Universidad la que está necesitada de esa adaptación", aunque ha reconocido que se halla "sometida al análisis, crítica y exigencias de los agentes sociales".

El rector de la UVA ha apuntado también los nuevos compromisos que poco a poco ha ido adquiriendo la universidad, en concreto el de la investigación, que "ha hecho más compleja la docencia" en el intento de "mantener ensamblada la dimensión científica, profesional y de divulgación".

Asimismo, ha destacado como "asignatura pendiente" el emprendedurismo no sólo en la universidad, sino también en la sociedad y las empresas como prototipos del actual sistema económico.

Por otra parte, Sacristán ha agradecido a los miembros de la comunidad universitaria su "colaboración y comprensión" en un momento en el que se soporta "el incremento de la reducción de los ingresos e incluso la pérdida de trabajo", así como a "las críticas razonadas y razonablemente expresadas" de las que ha asegurado compartir muchas de las mismas.

En lo referente a la creación del Estudio General de Palencia, "como origen de la institución de enseñanza superior en España", ha destacado su similitud con el actual sistema por la intensidad de la crisis.

El primero, fruto del poder eclesiástico y de la monarquía, que gracias a sus intereses comunes de proporcionar a sus súbditos un clima de estudio y cultura y a otros diferentes, llegaría a una total autonomía.