El 15M ocupa un edificio del Obispado de León

Miembros del colectivo 15M han ocupado un edificio propiedad del Obispado de León, el que albergaba la sede de 'Espabila', ubicado en la calle Dámaso Merino, con la idea de crear un centro social que permita desarrollar diferentes actividades y talleres, así como iniciativas constructivas y con el objetivo de experimentar formas de organización social "alternativas y abiertas" a todos.
  
Según ha explicado el colectivo, en los Presupuestos Generales del Estado (PGE) se ha realizado un recorte de más de 10.000 millones de euros en educación y sanidad, mientras que apenas se reducen las partidas presupuestarias para la Policía, la Casa Real y el Ejército.
  
En el caso de la iglesia, no se recorta "en un ápice" su asignación presupuestaria, además de disfrutar de una exención al pago del Impuesto sobre los Bienes Inmuebles (IBI) en todo su patrimonio.
  
Todo ello, ha agregado, priva al Estado de numerosos ingresos que podrían dedicarse a paliar el déficit presupuestario y, al mismo tiempo que se da esta situación, algunos dicen que la iglesia es uno de los organismos que más contribuye a paliar las consecuencias de la crisis entre los más pobres, con sus programas caritativos y de ayuda, informa ep.
  
Además, ha señalado que a la hora de presentar la Declaración de la Renta es cuando más fuerza cobra la campaña de la iglesia por "dulcificar" su imagen y centra la atención en sus programas de ayuda para alejar el interés sobre los "escándalos económicos y sexuales" en los que se ve inmersa, según ha informado el colectivo 15M León.
  
En cuanto al inmueble ocupado, propiedad del Obispado de León, ha manifestado que se alquila por 5.000 euros mensuales.
  
Por este motivo, los integrantes del 15M han decidido asentarse en el edificio para experimentar formas de organización social "alternativas y abiertas a todos" y denominarlo 'La casa de los sueños'.

Dispuestos a abandonarlo
  
No obstante, ha puntualizado que su voluntad de diálogo con los propietarios del inmueble es "firme", de modo que están dispuestos a abandonar el edificio si hay garantías de que el dinero obtenido con el alquiler se destina realmente a los programas de apoyo social con los que cuenta la iglesia.
  
Por este motivo, han propuesto que una asamblea ciudadana verifique el uso que el Obispado da a las rentas que le proporciona este edificio y compruebe que ese dinero se utiliza para financiar los programas de ayuda social en la ciudad.

"Rotunda repulsa"

Por su parte, la Diócesis de León ha expresado su "más rotunda repulsa" ante la ocupación del edificio por parte de miembros del colectivo 15M.

En su opinión, la ocupación supone el "desprecio" de la legalidad vigente; la "conculcación" de un derecho natural y legal de personas e instituciones; la ocupación sin permiso alguno y "con nocturnidad" de un inmueble que es legítima propiedad de la Diócesis; la "agresividad gratuita" contra la iglesia y las propuestas "demagógicas y prepotentes" del colectivo.

No obstante, la Diócesis está dispuesta al diálogo con los ocupantes del inmueble para escuchar las razones que alegan sobre este particular, sin que ello obste para que se emprendan cuantas acciones legales sean consideradas oportunas y conformes a derecho.  

Al mismo tiempo, ha explicado que el edificio ocupado está sin dedicación alguna desde que en el mes junio de 2011 el programa 'Espabila' del Ayuntamiento de León y en septiembre el ropero de Cáritas salieron del inmueble, aunque está utilizado como lugar de almacenaje de bienes muebles, alguno de ellos de singular valor, según ha informado la Diócesis de León en un comunicado recogido por Europa Press.

Además, con el Consistorio se convino el uso de algunas otras dependencias de propiedad diocesana para diversos usos sociales y culturales, servicios que no generaron ingresos económicos a favor de la Diócesis.

Igualmente, ha apuntado que el edificio ocupado está puesto en el mercado de alquileres con la finalidad de que, con los ingresos que pueda generar, se cubran los gastos de la habilitación que se ha hecho del edificio de Oscus, con entrada por la calle Sierra Pambley, donde se han instalado los servicios centrales de Cáritas, la ONGD Manos Unidas y las delegaciones de Misiones y de Apostolado Seglar.

De la misma forma, se pretende que los ingresos derivados del alquiler sirvan para acometer en un breve espacio de tiempo la adaptación del propio edificio en su parte de la calle Dámaso Merino, para acoger allí diversos servicios, instituciones y movimientos que en estos momentos no tienen sede o la tienen en condiciones precarias.