Herrera 'espeta' a López los resultados del Diálogo Social en Castilla y León

Como era de prever, la reforma laboral fue líder indiscutible de la tarde en el Pleno de las Cortes regionales, especialmente en las preguntas orales, con una elevada cuota de debate. De hecho, entre los espectadores se encontraban en la tribuna de invitados los dos responsables de UGT y CCOO, Agustín Prieto y Ángel Hernández, respectivamente, que llegaron al parlamento autonómico invitados por IU y PSOE y que se fueron bastante defraudados y ofuscados por lo que allí habían visto y oído, o mejor dicho, por no haber escuchado lo que hubieran querido oír.

El caso es que la sesión comenzó por todo lo alto, con el portavoz del Grupo Socialista, Óscar López, preguntando al presidente de la Junta, Juan Vicente Herrera, si creía que la reforma laboral era compatible con el Estatuto de Autonomía de Castilla y León y con el fomento del diálogo social.

Herrera no dijo ni sí ni no, pero sí dejó meridianamente claro que lo que es incompatible con la Constitución y con el Estatuto son  los tres millones de parados que se han creado en los últimos cuatro años, los cinco millones y medio de desempleados actuales y la tasa de paro del 23 por ciento.

El presidente de la Junta aprovechó entonces para reprochar a López que tras la reforma del Gobierno de Zapatero en 2010 a la que sucedió una huelga general, el líder socialista habló en ese momento de "medidas de acierto y necesarias, aunque duras".

Un primer golpe que López intentó esquivar reconociendo que en las todas las reformas laborales que se han realizado, "esta es una demolición en toda regla de los principios del trabajador y del diálogo social, es una reforma sin parangón". Interpeló después a Herrera para que contestase con un sí o un no si iba a pedir a Rajoy que cambiase la reforma laboral y, en todo caso, si tiene algo pactado para modificarla.

Tampoco consiguió una respuesta contundente por parte del presidente de la Junta, que acusó a López de "oportunista" por haber llevado a las Cortes la reforma laboral en la semana de la huelga general, y no inmediatamente después de ser aprobada por el Gobierno de Rajoy. Herrera mandó después dos "perlas" al líder de la oposición la primera fue asegurar que "ustedes están felices por los resultados electorales de Asturias y Andalucía", aunque matizó en este punto las elevadas tasas de paro de la comunidad andaluza, muy superiores a las que tiene Castilla y León. La segunda fue leerle unas recientes declaraciones de Agustín Prieto y Ángel Hernández (presentes en la tribuna), que calificaban de "trabajo serio, transparente y riguroso" el que se desarrolla en Castilla y León el marco del diálogo social, donde están presentes Junta, sindicatos y empresarios.

También el procurador de IU, José María González, quiso saber si Herrera estaba de acuerdo con la reforma laboral a lo que el jefe del Ejecutivo regional contestó que con lo que sí estaba de acuerdo era con la necesidad "de contar con un nuevo modelo de relaciones laborales" y, "con las manifestaciones del procurador que intervino antes que usted (por López) con las manifestaciones que realizó en 2010". 

Hubo otras tres preguntas por parte de otros tantos procuradores del PSOE y una más de IU sobre la reforma laboral y sus efectos en Castilla y León, efectos que para los interpelantes serán desastrosos y para el Ejecutivo regional serán beneficiosos.