La deuda con las farmacéuticas da mala imagen a España
jueves 23 de febrero de 2012, 13:38h
La imagen de España en los mercados internacionales está en entredicho
por la importante deuda que tienen contraídas las Administraciones
Públicas con la industria farmacéutica, ya que a finales de año
superaban los 6.300 millones de euros (algo más de un billón de las
antiguas pesetas). Esta cifra es el 50 por ciento de la deuda total en
Europa. Evidentemente, es un problema que trasciende ya del país.
Andalucía debe 1.500 millones; Valencia 1.200 millones y Madrid 700
millones de euros.
Diversos analistas consultados por diario e-Xclusivo
coinciden en que si a esta situación no se le pone remedio en poco
tiempo se verá afectado el normal suministro de medicamentos al Sistema
Nacional de Salud. En este punto hay que recordar que cuatro empresas
multinacionales han anunciado que, a partir del próximo mes de octubre,
dejarán de suministrar fármacos si las Administraciones Públicas no
pagan por adelantado. La amenaza que supuso para Grecia, el año pasado,
un anuncio similar, planea sobre España. La sanidad griega se quedó,
entre otros medicamentos, sin insulina para sus pacientes diabéticos.
Sin embargo, el Gobierno de Mariano Rajoy
y la industria farmacéutica están dispuestos a negociar soluciones
viables que atajen definitivamente este problema, que ha originado ya
cinco mil despidos cualificados de forma directa y veinte mil indirectos
en el sector farmacéutico, así como el cierre de numerosas empresas.
El
objetivo, según los analistas, es evitar que la deuda siga creciendo y,
para ello, habría que diseñar un mecanismo que respalde el Gobierno
central, en el que se establezca un calendario de pagos e implemente
soluciones concretas a corto y medio plazo para los pagos pendientes
(más de 6.300 millones de euros) y disminuir de forma notoria el plazo
de pagos que, actualmente, supera los 525 días.
A todo esto hay
que añadir que no habrá investigación financiada por este sector
industrial que, anualmente, invierte en I+D más de mil millones de
euros, el 20 por ciento del total de la industria española. Europa ya
nos ha tirado de las orejas por el anuncio gubernamental de reducir en
600 millones de euros la partida presupuestaria destinada a
investigación que afectará, principalmente, a las áreas cardiovascular y
cáncer.