La Junta decidirá sobre el SIP de Caja de Ávila y Caja Segovia antes de final de año

El vicepresidente segundo de la Junta y consejero de Economía y Empleo, Tomás Villanueva, ha afirmado que la Junta resolverá antes de final de año la autorización a Caja de Ávila y Caja Segovia para que se integren en el SIP que lidera Caja Madrid.

El Consejo de Gobierno abordará el asunto "este año", ha asegurado a la vez que ha negado la "ralentización" del proceso, ya que debe resolverse "más pronto que tarde, cuando tenga una idea clara que trasladar al Gobierno".

Tras su participación en unas jornadas sobre cooperativismo agrario, ha explicado que se trata de "un asunto complejo", que "no se resuelve por un acto administrativo automático, sino que exige un estudio de las relaciones contractuales que han pactado las entidades financieras que tratar de agruparse en este SIP", informa ep.

"No sólo hay que recabar informes de otras instituciones del Estado", ha continuado para añadir que hay que analizar el expediente desde el punto de vista de su conformidad con el derecho español y de las garantías de los empleados, depositantes y clientes, "y por los intereses del ámbito territorial donde tradicionalmente vienen operando".

Villanueva ha apreciado diferencias entre este SIP, al que la Junta se ha opuesto, y otros como el que ha conformado Caja Burgos en el Grupo Banca Cívica, ya que en esos otros casos "el volumen y la dimensión de las entidades era muy equilibrado", en el caso de Ávila y Segovia son "grandes entidades con otras muy pequeñas", ya que en el SIP participan Caja Madrid y Bancaja, de ahí que sea "complejo ver cómo quedan salvaguardados sus intereses y derechos".

Cooperativas agrarias

En otro sentido, Tomás Villanueva, ha abogado por aumentar el tamaño de las cooperativas agrarias, y en tal sentido ha animado a éstas a que "propicien y alcancen acuerdos de fusión e integración" entre ellas de cara a mejorar su competitividad.

Villanueva ha incidido en que constituye "una fórmula de competir con éxito, no sólo de subsistencia", el que estas entidades consigan "mayor dimensión y tamaño" ya que en la actualidad su pequeño tamaño es "un obstáculo para competir con garantías en un mercado globalizado".

"Hay muchas excesivamente pequeñas" que deben agruparse para "aprovechar las economías de escala". El tamaño y volumen de las cooperativas agrarias "influye no sólo en el coste de producción, sino que afecta al negociar con proveedores y clientes, reduciendo los costes de aprovisionamiento y los precios de venta de los productos".

Villanueva ha aludido a la importancia de las cooperativas agrarias en Castilla y León, ya que son 1.087--la mitad de todas las de la región--, con más de 58.000 socios y más de 2.300 trabajadores, facturando más de 1.800 millones de euros al año, el 3% del PIB de la Comunidad autónoma.

"La falta de recursos propios, los costes financieros asociados y la estructura de su capital" son los problemas a los que se enfrenta el sector.

Frente a esto, ha apostado por que la labor de comercialización la realicen ellas mismas, así como por la incorporación tecnológica, la calidad y una mejora en la gestión de unas entidades que son "elemento de cohesión y vertebración territorial".