A lo largo de una serie de redadas, los detectives de Scotland Yard descubrieron que los sospechosos tenían como objetivo un "hub" o concentrador, localizado en Docklands, que canaliza casi toda la información digital que llega al Reino Unido.
Los sospechosos, que ya han sido arrestados, pretendían atacar la sede de Telehouse Europe, que alberga docenas de servidores que contienen información sobre decenas de miles de páginas web.
Un oficial de seguridad bajo el anonimato reveló que los presuntos criminales planeaban infiltrarse en el concentrador para hacerlo estallar desde el interior, "y fue objeto de una intensa labor de reconocimiento". Las pruebas recogidas sugieren que era una de las opciones consideradas por los sospechosos, según el oficial.
Según la página web de los servicios secretos británicos, el MI5 "sin los servicios proporcionados por Telehouse Europe, el Reino Unido sufriría serias consecuencias, como graves daños económicos, desorden social o incluso pérdidas de vidas a gran escala".