Chávez insiste: “No nos callaremos nunca”

Durante una rueda de prensa en un hotel de la capital francesa, el mandatario sudamericano dijo que con la frase "¿Por qué no te callas?" del monarca español "explotaron 500 años de soberbia imperial".

"El Rey hizo una explosión porque llevaba horas oyendo hablar al indio Evo Morales, al indio Daniel Ortega y al indio Chávez", dijo, en referencia a sí mismo y a los presidentes de Bolivia y Nicaragua. "No nos callaremos nunca, seguiremos diciendo las verdades aunque exploten mil reyes", advirtió.

Chávez visita Francia de regreso de su viaje a Irán y a Arabia Saudita, donde participó en la reunión  de la Organización de Países Productores de Petróleo (Opep).

Tras entrevistarse con el Presidente francés Nicolás Sarkozy y constatar el fracaso de su gestión a favor de la ex candidata a la Presidencia de Colombia, Ingrid Betancour, quien permanecería como rehén de la guerrilla de las Farc, Chávez dijo haber recibido llamadas desde España para firmar un comunicado de reconciliación conjunto. "No lo acepto, fui yo el 'irrespetado', no él. Ahora me quieren hacer aparecer como que Chávez, 'el mono', arremetió contra el Rey".

El presidente venezolano insistió en que no se enteró de las palabras del monarca en el momento. "Si llego a escuchar lo que dijo, le hubiera tirado la corona al suelo", bromeó.

Previamente, en declaraciones a los periodistas, Chávez se mostró convencido de que Don Juan Carlos cometió "un error" al ordenarle callar, pero añadió que la polémica "quedaría saldada" si el Rey le pidiera "disculpas".

"Ahora lo que el Rey tiene que hacer, que es un hombre serio, es pedir disculpas y aceptar que a él se le fueron los tapones", declaró.

"¿A quién se le ocurre mandar callar a un jefe de Estado? A nadie", señaló el dirigente, para quien ese comentario supuso una falta de respeto. "El Rey, no sé por qué razón, perdió la paciencia y me gritó", dijo, antes de añadir: "Tuvo suerte porque yo no lo oí. Si no, le hubiera emplazado con mucha firmeza".

Sin embargo, Chávez pareció rebajar el tono respecto a declaraciones anteriores. "Amo a España —señaló—. No hay ningún conflicto con España, con la España que queremos mucho, con el pueblo español, con sus instituciones".