La mayoría arribaron a la isla de Tenerife, a bordo de varios cayucos con motor que zarparon de las costas africanas. A primera hora, un total de 103 personas llegaron al Puerto de los Cristianos. Varios de ellos contaron a la AFP que eran de Gambia, Senegal y Guinea Conakry; que habían navegado de cinco a seis días y que hace dos días se les acabó la comida.
Hasta la noche del domingo, habían llegado más de 500 subsaharianos sin papeles al archipiélago, aunque también desembarcaron otros grupos en la costa andaluza. En las últimas dos semanas, con el buen tiempo y temperaturas más elevadas, se intensificó la llegada de inmigrantes ilegales, que había bajado en los primeros meses de 2007 en comparación con el mismo periodo de 2006 (2.166, frente a 4.606).
El Ministerio del Interior emitió un comunicado afirmando que ha "intensificado" las repatriaciones de inmigrantes ilegales, "con el envío de cinco vuelos a Marruecos y Mauritania", adonde devolvieron a 168 personas. El incesante arribo de inmigrantes en 2006 a Canarias hizo que el Gobierno reforzara los controles marítimos y convenciera a la Unión Europea (UE) de reforzar la vigilancia en las costas del noroeste de Africa.
Más de 31.200 clandestinos africanos llegaron en 2006 a las islas Canarias, una cantidad superior al total de inmigrantes registrados en los cuatro años precedentes y tres veces mayor que el anterior récord de 2002 (9.929 ilegales).
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