La celebración del último pleno de la Legislatura era la señal convenida para que el Partido Popular comenzara a pulir sus listas electorales para las próximas elecciones autonómicas. Según nuestros cálculos, dicha sesión plenaria ha supuesto la despedida de aproximadamente una tercera parte de los 48 procuradores que hasta ahora han integrado el grupo parlamentario popular.
Aunque no se sabe con total exactitud quiénes serán los “nominados para abandonar la casa”, la ocasión merecía algún tipo de despedida y por ello Juan Vicente Herrera, que, además de la Junta preside el grupo parlamentario, el jueves, nada mas terminar dicho pleno, agasajó a los procuradores del PP con un almuerzo. El lugar elegido fue el restaurante Las Lomas y el menú un cocido madrileño. Entre los comensales -a los que se sumaron casi todos los consejeros de la Junta- se podían distinguir tres grupos: el de los que saben con total seguridad que van a continuar (cerca de 30), los que saben que no lo harán (una docena) y los que viven sin vivir en ellos (la media docena restante). En función de ello el cocido seguramente no les supo igual a todos.
Naturalmente no compartió ese cocido el procurador soriano José Antonio de Miguel, quien hace un par de semanas abandonó la disciplina del PP para liderar un nuevo partido provincial. Ello no fue óbice para que durante ese último pleno la vicepresidenta de la Junta, su paisana María Jesús Ruiz, se deshiciera en elogios hacia la labor parlamentaria de De Miguel a lo largo de la legislatura. Tan encendida loa de la presunta número uno de la lista a las elecciones autonómicas por Soria hacia el promotor del partido que va a competir con el PP soriano por el mismo espacio electoral en las próximas municipales, causó verdadera sorpresa en la bancada del grupo parlamentario popular. El propio Herrera, que escuchó desde su escaño la intervención de la vicepresidenta, no disimuló su estupor. Veremos si el hecho no trae alguna consecuencia en la composición de la lista autonómica del PP por Soria.
Si (
No(
