Diche el dicho latino aquello de "excusatio non petita, acusatio manifesta". Y algo está pasando en el PSOE andaluz para que, de pronto y sin venir a cuento, Ferraz haya movilizado a la vieja guardia al mando de Alfredo Pérez Rubalcaba y Manuel Chaves para reunirse en plan de urgencia con José Antonio Griñán, Mar Moreno, Luis Pizarro y los "griñaninis neonatos" Susana Díaz y Mario Jiménez. Más aún cuando un día después de la "cumbre", Mar Moreno concede una entrevista a Europa Press para hacer una infumable loa laudatoria a Pepe Griñán afirmando que "es un activo, no sólo del partido, sino de Andalucía" y añadiendo, ojo al dato, que "no hay ni un militante socialista que lo cuestione". Lo dicho esta "excusatio non petita..." significa que existe un alarmante malestar en las filas socialistas andaluzas, que son muchos no sólo los militantes -que también- sino los dirigentes provinciales que asisten estupefactos al progresivo deterioro de la marca socialista en manos de Pepe Griñán y que están esperando al presunto mal resultado de las municipales para presentar batalla con el fin de que no sea él el candidato a la Presidencia de la Junta. El desastre que le supondría al PSOE perder las elecciones autonómicas andaluzas de 2012, y por ende las generales, provocaría una desbandada de afectos y de "colocados" que costaría mucho recuperar. Y es que treinta años de gobierno ininterrumpido han creado demasiados compromisos y un excesivo clientelismo difícil de contentar en los presumiblemente malos tiempos que se avecinan.
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Si uno observa la foto de la "cumbre", celebrada en la sede regional del PSOE-A, en la calle San Vicente, de Sevilla, ve que se trata sólo de eso, de una foto publicitaria, de una pose como si fuera una reunión de "amigos" o "compañeros de trabajo" que se juntan en Navidad para celebrar estas fiestas. Porque, oficialmente, no hubo más. Solo la consabida frase de "el Gobierno está muy preocupado por lo que pasa en Andalucía" para vestir el muñeco y ninguna concreción, ninguna nueva inversión. ningún gesto de apoyo a la comunidad con el mayor número de parados de España. Es decir, que a buen entendedor, pocas palabras bastan. La reunión fue sólo para poner orden interno en el partido, para callar bocas que han comenzado a "piar" demasiado tras las últimas encuestas y que no hacen sino sembrar el desánimo entre la militancia. Rubalcaba y Chaves han venido a Sevilla para representar una pantomima de apoyo a Griñán (no es casual que en la foto estén flanqueándolo) para evitar desbandadas y extraños movimientos en la oscuridad: Pero no seamos incautos, estas sonrisas, esta camaradería, este apoyo actual puede tornarse en.lanzas a finales de mayo si, como anuncian los sondeos, el PSOE no logra gobernar en ninguna de las ocho capitales andaluzas. Ya lo anunció el pasado lunes el alcalde de Sevilla, Alfredo Sánchez Monteseirín, en su despedida pública en los Desayunos de La Raza, "en los tiempos difíciles, si te afliges, te aflojas". Y Pepe Griñán es muy dado a afligirse y a desanimarse cuando tiene algún contratiempo. Superalfredo ha venido a infundirle ánimos y a pedirle que "aguante el tirón" de la crisis, del paro y de la guerra de los funcionarios hasta que mejoren las cosas.
La pregunta ahora es: ¿será capaz Griñán de aguantar el envite de una ciudadanía harta de coles? ¿logrará convencer a ese setenta por ciento de andaluces que, según las encuestas, quiere un cambio de Gobierno en Andalucía? ¿podrá dominar a las fuerzas vivas de su partido de que él es la major apuesta de futuro del PSOE-A? Personalmente, lo dudo. No tiene ni la capacidad de aguante ni la paciencia de su antecesor, Manuel Chaves, y su soberbia y orgullo pueden jugarle muy malas pasadas. La respuesta, a finales de mayo.
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