La Audiencia Provincial de Málaga ha condenado a un hombre una pena de siete años de prisión por poseer armas de guerra, cuya tenencia está prohibida a particulares; por un delito de tráfico de drogas y por falsedad documental, ya que se le intervinieron documentos de identidad que manipuló colocando su foto.
La Sala declara probado que este acusado y otro fueron sorprendidos en mayo de 2007 por agentes de la Unidad de Drogas y Crimen Organizado (Udyco) en el aparcamiento de un hotel de Lloret de Mar con 410 kilogramos de hachís que se encontraba en los maleteros de dos coches. Según la sentencia, el valor de la sustancia, que iba a ser destinada a la venta, era de 20.050 euros.
Posteriormente, aunque el mismo día, agentes de dicha Unidad intervinieron en el registro realizado en la vivienda de este acusado en Fuengirola (Málaga) dos fusiles y sus cargadores, que tienen la consideración de armas de guerra. Además, se hallaron otras armas y cartuchos aunque no con dicha consideración, según se precisa en la resolución.
De igual modo, según señala la sentencia de la Sección Segunda, a la que tuvo acceso Europa Press, a este acusado se le intervino un permiso de conducir francés que el procesado había manipulado "fraudulentamente", colocando su fotografía, así como una balanza de precisión, 400 gramos de hachís y 17.000 euros.
En el registro de su vehículo, estacionado en el aparcamiento del aeropuerto de Málaga, se encontró una carta nacional de identidad de la República de Francia y un permiso de conducir francés con otro nombre, el cual también había sido manipulado fraudulentamente por el acusado colocando su fotografía.
Por otro lado, el Tribunal condena al otro acusado que fue sorprendido junto al anterior a una pena de tres años y un día de prisión y una multa de 60.000 euros por un delito contra la salud pública.
Asimismo, se declara probado que en la operación inicial estaban involucrados otros dos individuos, también acusados y condenados, "quienes participaron en la organización del alijo de sustancias estupefacientes realizando labores de logística, contacto con proveedores, organización y control".
Así, se hicieron registros en los domicilios de ambos acusados, hallando en la vivienda de uno de ellos, situada en Marbella, documentos que éste "había manipulado fraudulentamente colocando su fotografía", además de dos planchas de hachís y 550 euros. En la casa del otro, también en la misma localidad, se encontraron varias armas, y 2.000 euros.
Por ello, la Audiencia Provincial condena a ambos a tres años y nueve meses de prisión y una multa de 80.000 euros como autores de un delito contra la salud pública, y a 21 meses de cárcel y multa de unos 15.000 euros por falsedad documental, ya que también tenían documentos modificados. Además, a uno de ellos se le impone un año de prisión por el delito de tenencia ilícita de armas.
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