Así lo indicaron analistas y políticos de oposición al comentar el borrador de los presupuestos que se encuentra en fase de discusión en la Asamblea Nacional (Parlamento), de mayoría oficialista, pendiente de su aprobación antes del 15 de diciembre.
La administración de las "misiones", programas sociales en materia de salud, educación y vivienda que Chávez esgrime como uno de los mayores logros de su "revolución bolivariana", pasaría a depender directamente del despacho del mandatario.
Actualmente, pertenecen a los distintos ministerios y a la estatal Petróleos de Venezuela (Pdvsa), según recoge el texto. Para ello, el proyecto contempla la creación de un Fondo Único de Misiones para llevar el control y ejecución de estos programas, explicó a Efe la directora ejecutiva de la ONG Transparencia Venezuela, Mercedes de Freita.
Mientras que en 2009 el despacho presidencial contó con un presupuesto de 209 millones de dólares, en 2010 esta cantidad ascenderá hasta 1.504 millones, de los que 1.287 pertenecen al Fondo Único de Misiones.
Transparencia Venezuela ha solicitado a la Asamblea Nacional que revise la distribución del gasto público para no perder su función de órgano de control del poder Ejecutivo.
Según De Freita, de aprobarse el actual texto, Venezuela se desmarcaría de la "tendencia internacional a separar la política de los programas sociales para generar confianza en la población y que estos no se usen para sacar beneficio político".
En opinión de partidos políticos opositores, Chávez persigue gestionar de manera directa estos programas que benefician sobre todo a las clases populares con vista en las elecciones legislativas que están previstas para septiembre del año que viene.
El dirigente de Podemos, Ismael García, ex aliado de Chávez ahora en la oposición, consideró en declaraciones a Efe "desproporcionada" la cifra que manejaría "de forma directa y a discreción" Chávez y que, en su opinión, también subvencionará movimientos sociales latinoamericanos.
Según el diputado, la diferencia entre el precio de 40 dólares por barril de petróleo al que se calcularon los presupuestos y los 50 dólares que marcan las previsiones para 2010 también beneficiaría al poder central, que está "estrangulando" a gobernadores y alcaldes "a base de quitarles recursos económicos".
En este sentido, el dirigente del partido Proyecto Venezuela Carlos Berrizbeitia declaró a Efe que la partida destinada a alcaldías y estados se reduce en un 22 por ciento, y destacó también el incremento del gasto de Defensa hasta 3.000 millones de dólares, que equivalen al de otros seis ministerios juntos.
Los presupuestos contemplan en materia de "seguridad, custodia y transporte aéreo presidencial" un monto de 8,3 millones de dólares frente a los 5,5 millones de dólares de 2009, lo que se traduce en un gasto diario que iguala el presupuesto anual de la Policía de muchos estados, indicó el dirigente político.
"No queremos que le pase nada al presidente pero tampoco nos parece justo que con las altas tasas de inseguridad que hay en el país se dedique tanto dinero a la suya mientras faltan planes de prevención del delito", argumentó.
De esta manera, Berrizbeitia criticó el "doble discurso" de Chávez que "predica una austeridad de la que no hace gala él ni su entorno".
Así, mientras el país se encuentra inmerso en un programa de cortes programados de agua y luz como consecuencia de la incapacidad de los proveedores estatales de saciar la demanda existente, las partidas del despacho presidencial dedicadas a estos fines "casi se duplican".
Asimismo, Chávez dispondrá de 1,5 millones de dólares en telefonía y 8 millones de dólares en viajes al exterior, frente a los 6,5 millones de dólares de 2009.
Si bien estos presupuestos todavía están pendientes de aprobación por la Asamblea, Berrizbeitia cree que saldrán adelante pues, en su opinión, la "cámara venezolana no discute sino que aprueba sin cambiar ni una coma del texto supervisado por Chávez".
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