En rueda de prensa posterior a la firma de tres convenios entre el Ministerio de Interior y la Comunidad de Madrid en materia de seguridad, Rubalcaba comenzó su intervención con un pequeño lapsus, ya que cuando quiso decir "firmar", se le escapó un "filtrar". Las razones las dio en cuanto los periodistas le preguntaron por el caso Gürtel, donde explicó que él mismo explicó a la presidenta que no tiene nada que ver con las informaciones que están apareciendo sobre la trama corrupta relacionada con personas del PP.
"Hemos hablado de las filtraciones, le he dado una explicación a la presidenta, que me ha aceptado, y ya le he dicho que no, que la policía no es y punto y final", subrayó el ministro, quien apuntó que se alegra de que la presidenta le haya aclarado que no sospechaba de este Cuerpo.
Preguntado por si pone la mano en el fuego por todo su equipo, Rubalcaba comenzó asegurando que "poner la mano en el fuego" para políticos "experimentados siempre tiene su dificultad" pero que, sin embargo, no se lo tiene que pensar dos veces a la hora de ponerla por el secretario de Estado de Seguridad, Antonio Camacho, al que el PP ha pedido que declare por las supuestas filtraciones.
"Ahora, como ha habido una denuncia y el denunciado está delante de mí, digo que por mi secretario de Estado y porque no ha filtrado en su vida un papel y mucho menos un papel declarado secreto, pongo diez veces la mano en el fuego", sentenció.
Esperanza Aguirre se disculpa
Tras la reunión, la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, adelantó que va a llamar al presidente del Gobierno,
José Luis Rodríguez Zapatero, para pedirle disculpas tras calificarle de
"sindicalista retrógrado" tras la ruptura del diálogo social.
En un acto en la Puerta del Sol con el ministro de Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, la presidenta 'popular' ha dicho que no cree que "sindicalista sea ningún insulto, pero si a alguien le ha molestado", ha añadido, "pido disculpas".
Aguirre le canta a Rubalcaba: