Consideran de "ejemplar" la sentencia para Fujimori

Organismos de defensa humanitaria como Amnistía Internacional y Human Rights Watch, que enviaron a Lima observadores al juicio contra Alberto Fujimori, destacaron el carácter "ejemplar" de la sentencia de 25 años de cárcel.

Fujimori fue condenado por ser considerado el responsable último de las matanzas de Barrios Altos y La Cantuta (25 muertos en total), además del secuestro de un periodista y un empresario, delitos cometidos entre 1991 y 1992.

Javier Zúñiga, representante de Amnistía Internacional, señaló que el fallo "es uno de los más importantes de los últimos tiempos por referirse a las responsabilidades de un jefe de estado por crímenes cometidos por organismos que él mandó o ayudó a crear".

En este sentido, consideró que el fallo, al reconocer esta responsabilidad última con la tesis de la llamada "autoría mediata", pueden considerarse "un fallo ejemplar para el mundo por la forma en que el tribunal abordó las pruebas, que tendrá profundas implicaciones para otros casos de violación a los derechos humanos".

Así, comparó este caso con otros juicios similares en el que los acusados siempre pretenden desvincularse de los excesos cometidos por organismos de seguridad que se presentan como "manzanas podridas" o "elementos aislados", que ha sido precisamente la tesis esgrimida por la defensa y desbaratada por el tribunal.

Para Maria McFarland, observadora de Human Rights Watch, con la sentencia el tribunal ha enviado "un mensaje positivo para Perú y para el mundo: que una corte nacional es capaz de hacer justicia (en un caso de violación de derechos humanos), algo poco común".

McFarland destacó que "hace pocos años las cortes de justicia estaban dominadas por el propio Fujimori, y hoy una de ellas envía un mensaje importante sobre el papel de la justicia en un gobierno democrático y de protección a los derechos humanos".

"¡Keiko liberará al 'Chino'!", el grito de guerra de los fujimoristas

"¡Keiko presidente!", "Keiko liberará al chino!", se convirtió en nuevo grito de guerra de más de dos mil simpatizantes del ex presidente Alberto Fujimori, arrasados tras escuchar la sentencia del tribunal especial que condenó a su líder a 25 años de cárcel por violación de derechos humanos.

Los fujimoristas, vestidos con camisetas color naranja -símbolo del partido-, algunos de ellos con la cara pintada de ese color, con banderas y banderolas con la foto de Keiko Fujimori, la hija mayor del ex mandatario, no pudieron ocultar su rabia cuando se escuchó la sentencia.

"Si lo veo a ese juez (César San Martín, presidente del tribunal), por mi madre que lo reviento (lo mato)", dijo una anciana apenas se leyó la sentencia de 25 años y luego lloró sentada cerca del televisor.

La humilde mujer, una de las 50 seguidoras del ex presidente que venía de un barrio de extrema pobreza del distrito limeño de Ate, hizo vigilia desde la noche del lunes en el local partidario, a unos 300 metros de la Dirección Nacional de Operaciones Especiales (Diroes) de la Policía, donde fue juzgado el ex mandatario.

"¡No hay pruebas!", "¿Dónde están las pruebas?", se preguntó María Tejada, una robusta mujer que tenía en los brazos a un niño de dos años, y agregó que se manda a la cárcel a quien derrotó al terrorismo, y "tuvo los pantalones bien puestos" para combatir a los corruptos.

Las huestes fujimoristas se reunieron en el local partidario desde el día anterior, pero el grueso de los seguidores llegó en la mañana antes de iniciarse la audiencia. Muchos siguieron la lectura desde un televisor de plasma en plena calle, otros, desde los restaurantes cercanos a la Diroes.

Casi al medio día la presencia de unos 70 miembros de la Confederación de Trabajadores del Perú (CTP, aprista) y un grupo de mujeres de la organización feminista Flora Tristán -que venían a apoyar a los familiares de las víctimas- alteró el ambiente, aunque la policía controló la situación.

"El fujimorismo no se quedará con los brazos cruzados, saldremos a las calles, lo haremos de manera pacífica, pero obviamente saldremos a defender a Fujimori", dijo Keiko Fujimori en un improvisado discurso ante los simpatizantes.

"Nos sentimos orgullosos del trabajo realizado en el gobierno de mi padre", agregó Keiko, quien es la virtual candidata a la presidencia para el 2011 por el fujimorismo, quien estaba acompañada de su hermano menor Kenyi.

"Fuerza 2011", "Fuerza, Chino", "Chino valiente, aquí está tu gente", coreaba con un altavoz Amílcar Zevallos, de la base de Barranca (norte de Lima), que aseguró un mitin para al miércoles en la tarde y marchas en todo el país en protesta por la "injusta sentencia al mejor presidente que ha tenido el Perú".

Las manifestaciones en favor y en contra de la sentencia se circunscribieron a las cercanías del tribunal.

En el resto de Lima, ciudad de 7 millones de personas, la población siguió con atención las incidencias de la sentencia, transmitidas por televisión en todos los canales nacionales, pero la condena del ex presidente no despertó mayores pasiones ni a favor ni en contra.