Los invito a darnos un “paseito” por algunas incidencias de este “canje humanitario” convenido entre Colombia y Venezuela a través de sus mandatarios. El que esto se lograra dio de inmediato oportunidades diversas al venezolano para no sólo constituirse en noticia internacional, sino que también de alguna manera moderó para sus mismos opositores en distintos paises del mundo la prepotente y agresividad de su personalidad política.
Una coartada perfecta. En esa condición mediadora en la que están envueltas tantas vidas uno tenía, por lo menos, que darle a Chávez el beneficio de la duda: “que sea tan indiferente con los presos que tienen años sin un gesto de compasión o justicia de su parte” o “ que sea tan indolente con los secuestrados venezolanos” o “que sea tan irresponsable incitando al odio y la violencia” en su propio país no quita que tenga su corazoncito… se preocupa por la paz del hermano pais y sus secuestrados”.
Ese “coranzoncito” responde a su astuta estrategia política en la que el corazón es también lacayo. Allí, entre esos secuestrados, está una mujer colombiana-francesa valiosísima, víctima también de esta guerrilla. Francia lleva tiempo tratando de liberarla. Pero está su alianza con Irán… y Sarkozy es uno de sus más aguerridos críticos.
Aparece Piedad… Piedad Córdova con su turbante y su corazón rojito. Las imágenes colman la noticia internacional. Uribe, en un segundo plano, recuerda, reitera a cada paso que los “inamovibles” acordados entre las partes no seran alterados no se despejará un solo kilómetro... Las FARC continúan atacando… y Chávez enviando mensajes públicos: como Tarzán, se adentrará en la selva porque “necesita” ver a Marulanda, después, que sobrevuele la selva y donde lo vea se reunirá con él. Sarosky se involucra. No aparecen pruebas de vida. Chávez sigue llamando, suplicando a Marulanda, arropado por ese manto humanista va a la Cumbre Iberoamericana, acusa de fascista a Azanar, ex presidente español elegido DEMOCRATICAMENTE y el Rey lo manda a callar
Chávez lo utiliza y magnifica: El Rey se salvó que él no lo oyera, él es mezcla de negro e indio… ¡y no lo calla la corona! Ofrece las pruebas de vida y eso hace posible su entrevista con Sarkozy. Pero llega con las manos vacías… Rompe con una llamada al Ministro de Defensa colombiano, el pacto de confidenciabilidad con Uribe. Está en juego la soberanía de Colombia y la autoridad de su Presidente. Ya comienzan las acusaciones contra Uribe… es un lacayo del Imperio. Obedece al Imperio… Pero… ¿esto lo hubiera consentido Chávez?
Eso lo decidirán los intereses políticos y la hipocresía diplomática. Nosotros aquí, el 2 de diciembre, con una palabra muy corta podemos acabar con estas maniobras tenebrosas para nuestro país y nuestros hijos: ¡NO!