Zapatero ‘ha sacado pecho’ ante la flor y nata del poder económico español. Ése era el auténtico sentido del desayuno mantenido en Madrid en el Forum Nueva Economía ante 850 representantes políticos, económicos y sociales y 210 periodistas. El presidente del Gobierno llevaba dos mensajes: primero, garantizar a empresarios y sindicatos de lo bueno que ha sido 2006 y será 2007 para las rentas del trabajo y del capital en la España del mayor desarrollismo de la historia -según su propia visión-; y segundo, relanza ante ese poderío económico el mensaje de que España necesita un gran pacto de Estado contra el terrorismo en el que estén incluidos desde el PP hasta el PNV. En el entendimiento, claro, de que el proceso de paz con ETA “está roto” y que Batasuna no se presentará a las elecciones si no cumple los requisitos de la Ley de Partidos.
Hasta diez ministros arroparon este miércoles al presidente del Gobierno,
José Luis Rodríguez Zapatero, en el desayuno del Forum Nueva Economía que más expectación ha levantado en los últimos tiempos. Que el presidente del Gobierno quería ‘lanzar un mensaje’ era evidente: la fecha de este miércoles había sido reservada para el candidato socialista a la Alcaldía de Madrid,
Miguel Sebastián, pero fue la elegida finalmente por Rodríguez Zapatero para aceptar la invitación que le había cursado Forum. El hecho de que el desayuno se celebrara sólo 36 horas después del debate sobre política antiterrorista en el Congreso de los Diputados ha tenido algo que ver, sin lugar a dudas.
El caso es que, como era previsible, al acto se ha dado cita
la flor y nata del poderío político, económico, social y diplomático del país: allí estaban desde el poderosísimo
Emilio Botín hasta el no menos poderoso
Florentino Pérez; desde nueve ministros del Gobierno hasta el fiscal general del Estado y el Defensor del Pueblo; desde media ejecutiva del PSOE hasta el sintomático -ya se sabe por qué-
José Bono y
José María Hidalgo (CC.OO), y así hasta 850 invitados. Y, naturalmente, 210 periodistas, con conexiones de radio y televisión en directo. El marco ideal, sin duda, para lanzar mensajes.
Y dos mensajes han sido los que ha lanzado Zapatero: la necesidad de un pacto de Estado no sólo con el PP, sino con todas las fuerzas políticas españolas -¿quería el presidente convencer al poder fáctico para que éste, a su vez, presione a Mariano Rajoy en este sentido?-, y lo bien que le ha ido y le va a ir al mundo económico y empresarial -al gran capital, vamos-, e incluso a los trabajadores, con la política del Gobierno socialista.
Ruptura del proceso, Batasuna no se presentará, necesidad de un pacto
En el primer gran bloque desarrollado por Rodríguez Zapatero -el relativo al
“dolor y frustración de la sociedad española” porque ETA haya decidido volar el proceso de paz junto a la T-4 de Barajas- el mensaje presidencial era el de dar seguridades de que “el proceso está roto, ETA no tiene dos bazas: el diálogo y la violencia son incompatible”, aunque sea un derecho del presidente del Gobierno intentar la paz por todas las vías posibles, incluyendo la negociación; que Batasuna, con la Ley de Partidos en la mano, no podrá concurrir a las próximas elecciones municipales; que
“nunca vamos a pagar un precio político y ETA no tiene otro final que dejar la violencia”, y que en las actuales circunstancias -y dado que la violencia es
“el único gran problema de nuestra democracia”- se necesita un gran pacto de Estado entre todos, y no sólo entre el PP y el PSOE.
Estos son los ‘argumentos’ del presidente al respecto: sólo el 15 % de los españoles quiere un pacto antiterrorista a dos (entre PP y PSOE), y la inmensa mayoría lo quiere con todos los partidos políticos; el PNV tiene que estar en ese pacto de Estado –la formación nacionalista está excluida con el actual Pacto por las libertades y contra el terrorismo-; el acuerdo con el PP es posible, pero siempre que hay voluntad política y se dialogue
“sin condiciones previas”, y que
“es prioritario que todos nos coloquemos juntos en el mismo lado: en la lucha contra el terrorismo”, para que el Gobierno
“se sienta fuerte” para combatirlo.
Y una promesa final:
“Estoy dispuesto a hacer todo lo posible para que el PP esté con todos”. Sin embargo, parece difícil el acuerdo con Rajoy, pese a que, como adelantó en primicia Diariocrítico,
Eduardo Zaplana ha confirmado que el PP está dispuesto a ‘retoque’ en el pacto antiterrorista actual. ¿Llegarían a admitir al PNV, que está excluido en ese pacto? Lo veremos próximamente, porque este miércoles Zapatero ha anunciado que, efectivamente, va a convocar el pacto antiterrorista -es decir, la reunión a dos PP-PSOE- de forma paralela a las reuniones que va a mantener el ministro del Interior,
Alfredo Pérez Rubalcaba, con el resto de los partidos políticos.
España, ‘cohete’ económico-empresarial
Si la lucha contra el terrorismo constituyó el primer gran bloque de mensajes presidenciales, la
“España feliz” de Zapatero fue el otro gran bloque triunfante del presidente. No es que dijera nada nuevo respecto a la ya sabido, sino cómo lo dijo:
“2006 ha sido un año excelente, también lo será 2007 con “pleno empleo técnico al completo” y con la creación -en la legislatura- de tres millones de empleos.
“Se ha generado y distribuido en 2006 mucho bienestar: es el año más brillante de todo el periodo democrático”.
Y de ahí, al éxtasis: crecemos por encima de los países de la UE y estamos 30 puntos por debajo de la deuda de la Europa comunitaria; seguimos aportando reservas a la Seguridad Social, que va a llegar en 2008 a un fondo equivalente al 4 % del PIB; en 2007 se van a crear más de 600.000 empleos y la tasa de paro va a bajar del 8%; se han incrementado extraordinariamente las pensiones y el Salario Mínimo Interprofesional, se ha bajado el impuesto a empresarios y trabajadores y se está llevando a cabo la ‘reforma social’ con importantes leyes como la de dependencia y la de igualdad -entre otras muchas- gracias a la
“ejemplar actitud de nuestros sindicatos y empresarios”.
Sólo una nubecita circuló por los salones del hotel: Rodríguez Zapatero, en respuesta a una pregunta interesada -muy interesada-, confirmó que
“no está en el programa del Gobierno retomar la energía nuclear”: se irá a las energías renovables. Algunos inversionistas han podido quedar defraudados.