China importa 430 millones de litros y un 70% procede de la UE
Redacción | Jueves 06 de junio de 2013
¿Qué tienen que ver las placas
solares con el vino? Lo mismo que el tocino y la velocidad, pero a China
no le importa. Las autoridades de ese país asiático han decidido abrir
una investigación a la importación de vino europeo, como contrapartida
al aumento de los aranceles europeos a sus placas solares.
El conflicto, que perjudica a España, Francia e Italia podría ser
resuelto en la Organización Mundial del Comercio, mientras tanto se
habla de una vendetta china exagerada e imprudente.
La reacción no se ha hecho esperar. El Gobierno de Pekín ha respondido
rápido a las medidas provisionales adoptadas por la Comisión Europea
contra los paneles solares chinos, que entran este miércoles en vigor.
El Ministerio de Comercio del país asiático anunció el inicio de una
investigación por 'dumping' [vender por debajo del precio de coste] y
subsidios ilegales contra las bodegas europeas, cuyas exportaciones a
China sumaron más de 800 millones de euros en 2012.
"Se ha decidido abrir una investigación 'antidumping'", indicó el
Ministerio en un comunicado, donde asegura haber recibido quejas de
productores domésticos que acusan al sector del vino de la UE de llevar a
cabo estas prácticas de 'venta bajo coste, y
beneficiarse indebidamente de subsidios para entrar en el mercado chino.
"Hemos detectado en los últimos años un rápido incremento de las
importaciones de vino procedente de la UE", indicó el Ministerio de
Comercio, que garantizó que "la investigación se llevará a cabo
estrictamente según la normativa".
La decisión de Pekín se produce apenas un día después de que la Unión
Europea anunciara que impondrá desde este jueves un recargo arancelario
del 11,8% a las importaciones de paneles solares procedentes de China
como represalia por considerar que el país asiático vende estos
productos por debajo del precio de coste (práctica conocida como
'dumping').
Además, si en el plazo de dos meses China no presenta medidas
correctivas para acabar con estas prácticas desleales, el recargo
aumentará automáticamente al 47,6% a partir del 6 de agosto.
Estas sanciones provisionales tendrán una duración de seis meses. Al
final del periodo, serán los Estados miembros los que decidan si las
convierten en permanentes por un periodo de 5 años.
Un mercado en alza
Los vinos europeos copan alrededor del 66% de las importaciones
chinas. La imposición de sanciones en forma de aranceles podría dañar
esta posición de privilegio. Y para las bodegas españolas, el impacto
podría ser comparativamente mayor. "Nos puede hacer mucho daño porque
nuestros vinos son muy competitivos en precio y, además, prácticamente
nos sacaría del mercado de graneles", asegura Javier Serra, consejero
comercial jefe de la Embajada de España en Pekín.
España es el segundo mayor exportador de vino hacia China, sólo
superado por Francia, a pesar de que en el primer trimestre de 2012 las
ventas de vino español al gigante asiático cayeron un 30% en volumen,
según datos del Observatorio Español del Mercado del Vino (Oemv), aun
así vendimos cerca de 90 millones de euros de vino en China en 2012.
Casi el 30% de esta cifra es vino barato sin embotellar que después se
envasa en destino bajo el nombre de otra marca comercial. En el último
lustro, las exportaciones españolas se habían disparado en el país
asiático, llegando en algunos ejercicios a duplicarse. Aún así, la
víctima más relevante sería Francia, cuyos caldos copan más de un 50% de
las importaciones.
De este modo, China ocupa el octavo país del mundo dentro del ranking
de los 50 primeros países destino de la exportación española de vinos.
Por delante se colocan Alemania, que ocupa el primer lugar, con
exportaciones valoradas en 96,57 millones de euros, seguida de Reino
Unido (66,48 millones de euros), Francia (65,19 millones), Estados
Unidos (58,12 millones), Suiza (28,09 millones), Italia (23,33 millones)
y Países Bajos (19,28 millones).
¿Qué dice el sector?
En un comunicado que ha enviado la Federación Española del Vino (FEV) señala expresamente que "el
sector del vino español se siente una vez más secuestrado en un diferendo
comercial que tiene su origen en el procedimiento antidumping que la UE ha
abierto contra las placas solares chinas".
La
FEV ha querido manifestar así la gravedad de este anuncio que sin duda culminará en
el inicio de una investigación que puede suponer la imposición de tasas
antidumping y antisubvención a las importaciones de vinos procedentes de
a Unión Europea. Lamenta que el sector del vino se vea amenazado por unas
represalias comerciales que tienen origen ajeno al
sector.
"La
FEV, desde que conoció la posible apertura de este procedimiento, a
finales de 2012, ha estado en contacto constante con los responsables del
área de comercio en el Ministerio de Economía y Competitividad, la
Comisión europea y en coordinación con el resto de asociaciones bodegueras
europeas, y ha venido proporcionando a sus empresas la información para
saber cómo actuar en caso - como parece que va a ocurrir - que finalmente
se abra la investigación", concluye el comunicado
Las grandes Bodegas en China
La bodega Torres tiene una trayectoria
relativamente larga en China, en la que ha sabido adaptarse y
sobreponerse a dificultades. En 1997 Torres estableció una joint
venture, Torres Zhangjiakou Great Wall Torres Winery Co., con una de la
empresas locales de vino más importantes, Great Wall. Los primeros años
fueron sin embargo difíciles, con pérdidas, pero la empresa decidió y
supo aguantar.
En los últimos años ha sabido adaptarse a las
condiciones del mercado y el panorama ha mejorado de forma radical. Por
un lado Torres se dirige de forma prioritaria a un segmente de consumo
de alto nivel. Así, según la empresa, en China venden el doble de su
marca de más valor y prestigio, Mas La Plana, de lo que venden en
España. Por otro, la compañía ha diversificado sus actividades y se ha
abierto a la distribución de vinos de todo el mundo, creando para ello
la marca Everwines.
Una de las bodegas que cuenta con más de 8 años de presencia en China es Protos, con denominación de
origen Ribera del Duero. Su directora de exportación, Luisa de Paz,
considera que el consumidor chino, "aprecian la
calidad y empiezan a diferenciar los tipos de vinos".
"Se van
educando e interesando, ahora conocen más de cerca las bodegas, los
vinos y la calidad. Creo que el vino español está siguiendo el camino de
la gastronomía", valoró la ejecutiva de Protos.
Sin embargo, De
Paz consideró que "hay una clara necesidad de reforzar la marca España",
que, en su opinión, "sigue lejos de la francesa o la italiana".
Las primeras botellas de la bodega Vega Sicilia
no salieron al mercado chino hasta finales de 2012, aunque en palabras
de Pablo Álvarez, director general de la bodega, "se ha creado una gran
expectación en Asia, también por quiénes
somos", expresó "comenzaremos a
embotellar (tempranillo de 2009 y 2010) en los próximos tres meses"
El mercado asiático, que él trabaja personalmente desde 1988, "va
creciendo poco a poco, aunque es una labor lenta", "pero hay que estar",
sostuvo, y China, vaticinó, "será más lenta para los vinos españoles".
"Hoy por hoy (los caldos chinos) tienen mucho que avanzar. Pero
avanzar se avanza rápido", comprando técnica y contratando a expertos,
aseguró Álvarez, no ajeno por otra parte a la tradición china de
consumir té y espirituosos de alta graduación durante las comidas.
"China es un país difícil para el extranjero. Conozco a gente de
Francia que ha venido a China para tratar de establecerse y lo ha
retrasado. No es fácil", expuso el empresario, si bien no cerró
definitivamente la puerta: "No quita que en un futuro se pueda pensar".
TEMAS RELACIONADOS: