La 'nuestra', ante la fusión por absorción

En los despachos de Presidencia (Juan Vicente Herrera), como en los de Economía (Tomás Villanueva) y en los de la sede social del Banco España-Duero (Marqués de Villamagna, 6, de Madrid), se oye reiteradamente una expresión que popularizó en noviembre de 2005 el entonces presidente Rodríguez Zapatero, ante el fiasco de la Cumbre Euromediterránea de Barcelona: "Hay que cerrar un acuerdo como sea".

Es una obsesión. Hay que cerrar la fusión Unicaja-España-Duero ya, cuanto antes, en plazo y como sea...

Y aunque, es verdad, que el proceso de las negociaciones zigzaguea más que un ciclista acosado por la pájara a escasos metros de coronar el Alpe d'Huez, todo tiene un límite. En este caso, el 31 de marzo próximo, según las instrucciones del Banco de España.

Si finalmente se firma el acuerdo de fusión, como parece, lo importante es que ambas entidades habrán diseñado un itinerario viable para el futuro banco. Y si eso es así, habrá que celebrar que la "nuestra" (Caja España-Duero, propietaria del Banco España-Duero, el absorbido), pudo evitar finalmente la intervención, la nacionalización temporal, o como se le quiera denominar. Sin embargo, al mismo tiempo, también habrá que poner de relieve qué precio habrá tenido que pagar la "nuestra".

De momento, lo que se sabe es que, al margen de ingenierías financieras y contables, España-Duero se dispone a entregar más cuota de poder a la malagueña. Es decir, que en lugar de aportar cinco de los quince consejeros, puede quedarse en tres o cuatro representantes. Y que, si su participación en el nuevo banco baja del 30% pactado al 20%, o menos, perdería también la posibilidad de bloquear acuerdos en los aspectos calificados como "materia reforzada" (una nueva fusión, por ejemplo), que requieren el apoyo del 75% de los miembros del consejo (once de los quince).

El presidente de Unicaja Banco, Braulio Medel, que ha negociado desde la extraordinaria situación de la entidad que preside en términos de solvencia, asumirá inicialmente todo el poder. Hará y deshará a su criterio, frente a una representación inerme y satisfecha por haber esquivado la intervención. Pero, en fin, Medel también habrá dejado algunos pelos en la gatera, como se suele decir por estas tierras. Y ya se habla, con cierto fundamento, de su relevo. El candidato es el actual vicepresidente primero de Unicaja, Manuel Atencia Robledo (designado por el PP).

Manuel Trapote. Periodista.