Este
miércoles
Martes 18 de noviembre de 2014
Lucas
Azcona, el joven de 22 años detenido como sospechoso del crimen de Nicole
Sessarego Borquez, será sometido mañana y el jueves a peritajes en la cárcel de
Ezeiza, informaron fuentes judiciales.
Los
peritajes se realizarán en el pabellón psiquiátrico del Complejo Federal I de
Ezeiza, dependiente del Servicio Penitenciario Federal, donde el imputado
permanece alojado desde que fue indagado por el juez.
Mientras
aguarda que se realicen esos exámenes médicos, el juez de la causa, Luis
Zelaya, continúa recibiendo declaraciones testimoniales de supuestas víctimas
del detenido Azcona, en diversos episodios ocurridos en la zona sur del
conurbano tiempo atrás.
Esta
mañana, declaró una joven que dijo haber reconocido a Azcona cuando, tras ser
entregado por su familia a la policía por el crimen de Nicole, vio su imagen en
los medios de prensa.
Esta
joven es una de las varias que se acercaron a declarar al reconocer al
sospechoso detenido por el homicidio de la estudiante chilena como su atacante.
El
juez y funcionarios de su tribunal
evalúan además los resultados de la reconstrucción del crimen de Nicole, que se
realizó anteayer en la puerta del edificio donde vivía la víctima, en Don Bosco
4109, del barrio porteño de Almagro, donde fue asesinada el 15 de julio
último..
El juez
dispuso un "ordenamiento secuencial" de la reconstrucción para reproducir
lo que surge de los registros de las cámaras de video del gobierno porteño y
privadas instaladas en la zona del crimen y que fueron incorporados a la causa.
De
acuerdo a los expertos, el ataque a puñaladas a la joven duró menos de tres
minutos y se produjo por la espalda.
Nicole
fue asesinada de 11 puñaladas la madrugada del 15 de julio último cuando
llegaba al departamento que alquilaba, luego de haber ido a bailar al boliche
"Barhein", situado en Lavalle 345.
Días
atrás, luego de haber reconocido a Azcona en las imágenes de las cámaras de
seguridad difundidas por los investigadores, el padre del acusado lo entregó a
la policía y quedó detenido.
Tras
negarse a declarar y a sacarse sangre para un cotejo de ADN, el juez ordenó una
extracción compulsiva que mandó a estudio y de allí surgió que el perfil
genético de Azcona coincidía con el hallado en cuatro muestras de sangre
levantadas en la escena del crimen que no eran de la víctima.
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