Manuel Suárez Suárez | Jueves 16 de octubre de 2014
En la
capital uruguaya dejaron su huella miles de gallegos desde los tiempos de la
lucha independentista comenzada por el egregio patriota José Artigas. La
historia de la República Oriental del Uruguay lleva sangre gallego en todos los
tejidos de su cuerpo y quizás por eso es hoy una tierra de futuro. No se
necesita profundizar mucho para encontrar familias de "horneros gayegos" en
cualquiera de los barrios montevideanos. El hornero es un pájaro arquitecto que
anida cada primavera en su nuevo hogar de barro. Los picos de la pareja avícola
semejan ser las manos de los alfareros emigrantes que levantaban la casita para
cobijar a los descendientes.
No hay
actividad en la que no reconozca el esfuerzo solidario de los valientes
emigrantes que tuvieron que dejar ---con lágrimas en los ojos--- su verde
paraíso atlántico. La gran mayoría de los gallegos afincaron en zona urbana
pero no hay que olvidar a los que aposentaron en las zonas rurales. Los
interesados en documentarse sobre los gallegos del rural pueden consultar el
esclarecedor estudio del prof. Zubillaga Barrera, Identidad inmigratoria: los
gallegos y la literatura gauchesca en el Uruguay de la modernización; donde
subraya que "no es casual que cuando el gallego emigra al Plata y se asienta en
un medio en el que perduran (aunque condicionadas por los cambios que se vienen
operando en el marco de la modernización) las tradiciones de la rebeldía gaucha
y sus expresiones literarias, encuentre similitudes con su sociedad de origen".
El
domingo 26 las urnas aguardan por los votos de unos ciudadanos que en unas
elecciones generales decidirán si continúa activo el programa de inclusión
social o vuelven al escenario los "chamuyadores blancolorados" que oscurecieron
el sol de la bandera que se mecía altiva sobre la heroica Banda Oriental. Hay
tres candidatos con posibilidades pero solamente uno de ellos, Tabaré Vázquez,
posee un empuje anímico que lo ayudará a obtener el triunfo. La maquinaria
electoral de la oposición anda enloquecida procurando cualquier hueco que pueda
usarse para debilitar al candidato del actual partido en el gobierno, el Frente
Amplio. Creo que se revientan contra un ser humano de una excepcional calidad
sentimental. La fuerza de Tabaré está en su vacunado corazón de nieto de
Galicia. No existe el virus que pueda afectar a quien fue protegido con las
gotas del sudor que los abuelos dejaron en las orillas del Pantanoso.
Nuestro
nieto montevideano hereda una ética familiar que lo hace caminar sin vueltas.
Su herencia no incluye un apellido contaminado por antiguas trayectorias
coimeras. Su apellido es el mismo que llevan tres honrosos luchadores a favor
de un Uruguay más culto y democrático: Santiago Vázquez [1787-1847], Francisco
Vázquez Cores [1843-1914] y Alfredo Vásquez Acevedo [1844-1923]. El origen de
Vásquez o Vázquez hay que buscarlo en el nombre de pila, Vasco. Un ejemplo lo
tenemos en Vasco de Aponte, un noble gallego del siglo XVI, autor de una
pionera obra sobre sobre genealogía. Aprovecho para comentar que cursé mis dos
años de estudios pre-universitarios en el instituto que recuerda a Vásquez
Acevedo [el muy famoso I.A.V.A.] como así lo hicieron el actual presidente
Mujica y también Tabaré Vázquez.
El
"gayego" Fernando Lorenzo ---ex ministro de Economía con Mujica--- tiene raíces
en Rianxo por lo cual coincide con Tabaré en el origen y por eso cree en la
misma ética emigrante de que administrar bien es tener clarito que no se puede
gastar lo que no se tiene. Hace unos días, Fernando, en un acto de su
agrupación electoral comentó que "los cambios sociales realizados en estos
nuevo años de gobierno están asentados". Espero confiado en que así sea y que
la mayoría de la ciudadanía sea consciente de que el país mejoró porque el
gobierno cumplió con la máxima aristotélica de que la política "es la búsqueda del bien común para
una sociedad en general". El sabio griego consideraba que la política tiene una
única finalidad: "hacer felices a los ciudadanos de cada estado, nación o
país". Los blancolorados compiten entre ellos para ver quien promete más,
desconociendo la reflexión de Francisco de Quevedo sobre que "nadie ofrece
tanto como el que no va a cumplir".
No
exagero nada si digo que hay un hecho que es suficientemente significativo para
que Tabaré gane las elecciones. Estoy pensando en que el actual gobierno llevó
la energía eléctrica y la conexión a Internet a todas las escuelas del país.
Fue en una escuela de "Paso de las Carretas" [Tacuarembó] donde la
administración Mujica puso el cierre a una antigua historia de discriminación
entre los servicios urbanos y rurales.
El gobierno frenteamplista cumplió porque como bien expresaba José Martí:
"Hacer es la mejor manera de decir". ¡Así se construye! La luz alumbra en las
aulas y al mismo tiempo en los corazones de los botijas que no son giles y
comprueban que en Montevideo tienen un gobierno que no los olvida. El Frente
Amplio está sementando esperanza. La innegable dignificación de los escolares
rurales indica que la acción gubernamental camina por una correcta línea ética.
Por la contra, a los recientes gobiernos "blancolorados" no les interesaba la
vertebración del país. Sus ojos se focalizaban en las urnas observando que se
iban vaciando de partidarios en relación directa con el aumento de la
educación.
El
triunfo de Tabaré se fundamenta en un seno familiar de emigrantes que no
cruzaron el mar para vivir del cuento. Los Vázquez Edreira viajaron llenos de
tristeza pero enseguida sonrieron al ver que los recibían con cariño. El nieto
de aquellos valientes viajeros de Santiago de Compostela y de Vilar de Astrés
[Ourense] es una persona honesta que inspira confianza. Estoy deseando que
llegue el mes de marzo para acercarme a Montevideo. Quiero celebrar con mis
amigos de la "609" el éxito de un pueblo que avanza en la concreción de un programa
de equidad que hará del Uruguay un alegre espacio de libertad. Aprovecharé para
hablar con el presidente del Centro Ourensán ---también apellidado Vázquez---
para proponerle que tenga a bien el nombramiento de Tabaré como "Socio de
Honra" del lugar donde los afiladores mantienen encendido el fuego de la
identidad.
El 11
de abril de 1956 muere en Montevideo el reconocido intérprete y compositor
musical Joaquín Barreiro. Si recuerdo a Barreiro es porque además de paisano de
Tabaré ---nació en Ourense en 1904--- fue un muy talentoso director de orquesta
al que Carlos Gardel le grabó dos tangos: Farabute [1928] y Un año más [1930].
Las letras de los dos tangos son obra del canillita Antonio Casciani. La noche
del 31 de diciembre el tema Un año más se cantaba en las despedidas y se
escuchaba en las emisoras de radio. En la próxima noche de fin de año ---antes
de la obligada docena de uvas--- escucharé la mágica voz de Gardel de
Tacuarembó y haré un brindis especial dedicado al presidente electo Vázquez
Rosas. Se que en la otra orilla del Atlántico estará escuchando un esforzado
nieto de Galicia que se alegrará con el grito de un apasionado hincha de
Peñarol: Forza Tabaré!
MANUEL SUÁREZ SUÁREZ
TEMAS RELACIONADOS: