Los presidentes de la Comunidad latinoamericana y caribeña
reiteraron su respaldo a la soberanía argentina sobre las islas y anunciaron
una nueva gestión ante la ONU para promover el diálogo.
Los jefes de Estado y de Gobierno del bloque reiteraron
"su más firme respaldo a los legítimos derechos" soberanos de la Argentina en Malvinas y anunciaron una nueva
gestión ante el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, para promover la
reanudación de negociaciones entre la Argentina y el Reino Unido.
Los 33 países que componen la CELAC expresaron su postura
mediante un "
comunicado especial" que, junto a otros, fue dado a
conocer al concluir la cumbre que se desarrolló en la capital chilena.
También hay una mención a la cuestión Malvinas en el punto
cuatro de la Declaración de Santiago, el documento final de la cumbre.
En el comunicado especial sobre el tema, los firmantes
destacaron en particular
"la permanente actitud constructiva y disposición
del Gobierno argentino para alcanzar, por la vía de las negociaciones, una
solución pacífica y definitiva".
"Las jefas y los jefes de Estado y de Gobierno de
América Latina y el Caribe, reunidos en Santiago, reiteran su más firme
respaldo a los legítimos derechos de la República Argentina en la disputa de
soberanía sobre las Islas Malvinas, Georgias del Sur y Sándwich del Sur y los
espacios marítimos circundantes", afirmaron.
En el mismo párrafo inicial, los presidentes expresaron
"el
permanente interés de los países de la región en que los Gobiernos de la
República Argentina y del Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte reanuden
las negociaciones a fin de encontrar, a la mayor brevedad posible, una solución
pacífica y definitiva a dicha disputa".
En este orden, recordaron
"los pronunciamientos
pertinentes de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) y de la Organización
de los Estados Americanos (OEA), tal como lo han manifestado en las anteriores
Declaraciones del Grupo Río y de la Cumbre de América Latina y el Caribe
(CALC)".
Los presidentes reiteraron además la importancia de observar
lo dispuesto
"por la Resolución 31/49 de la Asamblea General de las
Naciones Unidas que insta a las dos partes a que se abstengan de adoptar
decisiones que entrañen la introducción de modificaciones unilaterales en la
situación mientras las Islas estén atravesando por el proceso recomendado por
la Asamblea General".
En este contexto, destacaron en el punto cuarto del
comunicado, "la permanente actitud constructiva y disposición del Gobierno
argentino para alcanzar por la vía de las negociaciones una solución pacífica y
definitiva a esta anacrónica situación colonial en suelo americano".
Finalmente, solicitaron a la conducción del bloque regional
"una nueva gestión ante el Secretario General de las Naciones Unidas,
señor Ban Ki-moon, para conocer el estado de avance de sus gestiones en el
marco de la misión de buenos oficios que le fuera encomendada por la Asamblea
General a fin de que se reanuden las negociaciones entre la Argentina y el
Reino Unido tendientes a encontrar a la mayor brevedad una solución pacífica a
la disputa de soberanía, referida a la Cuestión de las Islas Malvinas".
Antes de la divulgación del comunicado, en el plenario
fueron varios los mandatarios que se refirieron en sus discursos al reclamo
argentino, con respaldo regional, respecto de la soberanía en Malvinas.
El vicepresidente venezolano,
Nicolás Maduro, leyó una carta
firmada por
Hugo Chávez que contenía un pronunciamiento contundente sobre el
tema.
Allí Chávez condenó además la "
militarización
progresiva de las Islas Malvinas" por parte de Gran Bretaña y llamó al
cumplimiento de las resoluciones de la ONU.
"R
atificamos la denuncia y la condena del vergonzoso
bloqueo imperial a la Cuba martiana y revolucionaria; la continua colonización;
y, ahora, la militarización progresiva de las Islas Malvinas", dijo Chávez
en la carta que escribió con tinta roja en La Habana, donde sigue internado.
El presidente de Venezuela señaló que "
ambos hechos son
violatorios de todas las resoluciones que ha emitido las Naciones Unidas para
salvaguardar los derechos de los pueblos cubano y argentino, pero sin voluntad
alguna de parte de este organismo supranacional para hacerlas cumplir".
"La justicia está incontestablemente del lado de Cuba y
de la Argentina", escribió Chávez y agregó: "Si somos una nación de
repúblicas, nuestra soberanía es de toda la Patria Grande, y debemos hacerla
respetar".
A su turno, el jefe de Estado cubano y nuevo presidente pro
tempore de la CELAC, Raúl Castro, también fue enfático al sostener que
"las Malvinas son argentinas".
El presidente de Chile y anfitrión,
Sebastián Piñera,
destacó que su país
"apoya absolutamente la soberanía argentina
Malvinas".
El mandatario chileno reiteró así en la sesión plenaria un
respaldo que ya le había expresado ayer a la presidenta
Cristina Fernández de
Kirchner en el marco de un encuentro bilateral que mantuvieron al termino de la
cumbre entre los países de la CELAC y los de la Unión Europea (UE).
Durante el debate de mandatarios, también el presidente de
Nicaragua,
Daniel Ortega, manifestó su "
solidaridad con el pueblo
argentino en su lucha por la soberanía de las islas Malvinas".