El partido, el último que disputaban ambos equipos en el hexagonal final, fue parejo y ambos desperdiciaron varias oportunidades de gol. Pero en el último segundo, un golpe de cabeza de Lautaro Acosta le dio a Argentina la clasificación.
El consuelo de ir al Mundial tuvo gusto a poco para los celestes y la desazón fue enorme en Uruguay porque desde 1928 – año en que conquistó el título Olímpico- el seleccionado de fútbol no participa de los Juegos.