El canónigo de la Catedral denuncia en el Sermón de las Siete Palabras que la crisis "cercena" a la mujer la posibilidad de ser madre
viernes 06 de abril de 2012, 12:08h
No hubo procesiones el Jueves Santo en Valladolid. Hasta once desfiles
procesionales tenían que haber salido a la calle durante la noche y la madrugada,
pero las intensas precipitaciones lo hicieron imposible. Miles de personas
optaron, entonces, por acudir a las iglesias de la capital vallisoletana para
cumplir con la tradición, donde había inmensas colas y, al mismo tiempo,
contemplar las imágenes que permanecían en los templos.
Las cofradías optaron por celebrar actos penitenciales en el interior de
las iglesias, aunque en algunos casos, como en la procesión de Nuestra Señora
de la Amargura se intentó desafiar el mal tiempo y se echó a la calle, aunque
tuvo que regresar minutos después.
Tampoco el tradicional Pregón de las Siete Palabras, en el que un cofrade a
caballo recorre las calles de Valladolid para convocar al pueblo fiel al
tradicional sermón, se ha podido realizar, si bien en este caso ha sido la
intensa nevada que caía a primera hora de la mañana sobre la ciudad de
Valladolid. El pregonero se ha limitado a recoger el pregón de manos del
arzobispo de Valladolid, Ricardo Blázquez, y pronunciarlo en la puerta del
Palacio Arzobispal.
También el sermón, pronunciado por el canónigo de la Catedral José Andrés
Cabrerizo, se ha tenido que cambiar de ubicación, habitualmente en la Plaza
Mayor, y se ha desarrollado en la Seo vallisoletana. El acto fue seguido por el ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, además de autoridades locales, provinciales y autonómicas y, por supuesto, por los integrantes de todas las cofradías y el pueblo fiel.
Cabrerizo ha denunciado los "terribles efectos" de la crisis y la sociedad que "cercena" a la mujer la
posibilidad de ser madre. Además, ha cargado contra el aborto y ha advertido de que "el logro de nuevos derechos, dando legitimación a prácticas, acciones o actitudes que laven" la "cara frente a los demás" para construir "una moral a medida", supone "repetir el primer pecado del hombre", como es "el egoísmo".
En su alocución, el canónigo de la Catedral también ha cargado contra los aspectos favorables a la interrupción del embarazo de la Reforma Sanitaria del presidente de Estados Unidos, Barack Obama, que conlleva "la imposición a todas las empresas en los seguros médicos a sus trabajadores" de unas medidas que "chocan frontalmente con la doctrina de la Iglesia en materia de anticoncepción y aborto", informa Ep.
"Para la iglesia en los Estados Unidos el cumplimiento de la voluntad de Dios está en denunciar y oponerse a esa legislación y mover las conciencias, que tiene una clara relevancia en este año electoral", ha añadido.
El canónigo ha pronunciado estas palabras en referencia a la Segunda y la Sexta Palabra que dijo Cristo en la Cruz, 'Hoy estarás conmigo en el Paraíso' y 'Todo está consumado'.