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Más de 400 personas presentes

La colectividad española le brindó una emotiva recepción a Rajoy
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La colectividad española le brindó una emotiva recepción a Rajoy

Expresaron su postura sobre la situación que se vive en España

Por Eduardo Fleming
lunes 16 de abril de 2018, 15:50h

Más de cuatrocientas personas participaron de la recepción que le brindó la Federación de Sociedades Españolas en el Club Español al presidente Mariano Rajoy, en la que le expusieron su postura sobre cuatro ejes fundamentales: Cataluña, transición española y principalmente su preocupación en cuanto al voto rogado y al acceso a la nacionalidad española para aquellos que se quedaron fuera en la Ley de Memoria Histórica.

La colectividad española hizo sentir como en su propia casa a Mariano Rajoy, en un Club Español que ya lo había recibido en el 2007, donde como una profecía había puesto en el Libro de Oro de la institución que iba a volver como presidente, por lo que con la promesa cumplida, todo fue alegría y buenos tratos en la centenaria institución.

Tras una bienvenida muy emotiva por parte del Presidente del Club Español José Benito López Carballedo, en la que recordó a las grandes personalidades españolas que visitaron a lo largo de la historia las instalaciones de la emblemática institución, -mientras el jefe de gobierno Horacio Larreta se asombraba al escuchar los encumbrados nombres que mencionaba- llegó el turno del presidente de la Federación de Sociedades Españolas José María Vila Alén, de hacer uso de la palabra y expresarle a Rajoy cuales son las inquietudes que tienen los españoles en el país, y cuál es la postura con la que cuentan sobre los temas cruciales de la actualidad española.

En primer término –y siguiendo con la emotividad de López Carballedo, Vila agradeció la presencia su presencia, y le dijo desde el corazón lo importante que sería para todos “si tuviese idea lo que significa para cada uno de nosotros que este aquí”. En la misma línea Vila resaltó la “sensibilidad y capacidad del Embajador Sandomingo, quien cumple a creces su función en Argentina”.

Tras los agradecimientos de ocasión pasó a un tema álgido, del que lo sostiene en cada uno de sus actos, pero del que también sabía que era una manera que Rajoy lo escuchara con mayor atención a la hora que llegaran las inquietudes. EL presidente de FEDESPA le dijo a Rajoy que “todos somos profundamente españoles”, donde “sostenemos a una España unida”, al referirse a la situación de Cataluña, mientras Rajoy asentía conforme, y a continuación Vila remarcó la importancia que tuvo la transición española para el desarrollo del país.

Con ese mismo sentimiento le aseguró a Rajoy que “somos profundamente argentinos, y somos profundamente españoles, con un corazón que es enteramente español y eternamente argentino”, donde “trabajamos todos los días sobre la marca España”.

En los aspectos puntuales que requieren los españoles en Argentina, Vila Alén no anduvo con vueltas, ante la atenta mirada de Rajoy: la necesidad de eliminar el voto rogado –decisión que el Congreso español acordó tratar con celeridad tres días después de este pedido- y la reforma a la Ley de Nacionalidad para que todo aquel que se quedó injustamente fuera cuando se incluyó en la Ley de Memoria Histórica pueda acceder a la misma. El presidente de la Federación es consciente de lo complejo del tema pero junto a la colectividad “aspiramos que ambas cámaras reflexionen”, fue la ilusión y el pedido del dirigente.

Larreta y la llave de la Ciudad

El Jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires Horacio Larreta aprovechó la presencia del presidente español para entregarle la llave de la Ciudad. Larreta calificó a la colectividad española como “muy pujante que participa activamente en la vida diaria de la Ciudad de Buenos Aires”, una ciudad “cosmopolita donde se respeta los orígenes de cada uno, en la que también todos nos sentimos muy porteños”.

El discurso de cierre fue para el presidente Rajoy, quien le respondió a Vila Alén y a toda la colectividad sobre la situación de Cataluña con un mensaje de tranquilidad “España es un gran país, estamos orgullosos de la constitución· "Estoy absolutamente convencido de que el sentido común se va a imponer, y en cualquier caso algunos deben de saber, ya lo han sabido, lo que ocurre en el supuesto de que pretendan saltarse la Constitución, la ley, las normas y la voluntad de los españoles", recalcó.

Sobre la situación de España remarcó que está en constante crecimiento a pesar que cuando asumió el gobierno “Estuvo al borde de la quiebra y del rescate”, pero que gracias a las medidas tomadas y al “pueblo español” que mostró “coraje, valentía y su capacidad de no rendirse nunca” pudieron salir adelante.

El presidente aseguró que es “un honor para mí estar aquí, les había puesto en el libro de honor en el 2007 que vendría a firmar nuevamente el libro como presidente de España y volveré dentro de diez años ya veremos en qué condición” despertando el aplauso de todos.

Agradeció a Larreta su presencia y el haberle otorgado la llave de la ciudad: “es muy reconfortante como gallego y español, no conozco un gallego que no tenga un pariente o conocido en Argentina y como político, aunque no lo crean también tenemos sentimientos”.

Tras los discursos llegó el momento esperado por todos. Las dudas sobre si Rajoy se iba a acercar a conversar con sus rápidamente quedaron disipadas. Pese a los esfuerzos de sus custodios, el presidente recorrió todo el salón y conversó –lo que pudo- con quienes se las ingeniaban para sortear a los hombres de seguridad, recordando algún momento compartido

El único momento que puso serio a Rajoy fue cuando el joven consejero del CRE Xoan Manuel Negreira le entregó una carta en donde le pide que “España cumpla con los derechos y con los tratados internacionales asumidos para que Argentina el poder judicial de la República Argentina pueda juzgar y cumplir con el exhorto de diecisiete torturadores que solicita la República Argentina”. Negreira contó a Diario Crítico de Argentina que “le entregué una carta firmada por mí y por Gustavo Fernández en carácter de Consejeros del Consejo de Residentes En mi carácter de Consejero del CRE como también lo hizo Gustavo Fernández, para solicitar la colaboración y la obligación en el aspecto jurídico por parte de España en la extradición de estos torturadores”.

Así pasó una vez más Rajoy por Buenos Aires, llevándose la llave de la ciudad, pero lo más importante el cariño de los españoles, prometiendo un futuro regreso, ya seguramente sin la obligación de funcionario, aunque muchos lamentaron que se haya desaprovechado la oportunidad de haber tratado en profundidad problemas tales como los del Centro Gallego, el del Deportivo Español, o bien los comentados por Vila Alén como los del voto rogado y el acceso a la nacionalidad.

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