La Comunidad no recuperará hasta 2022 los ritmos de creación de empleo y reducción de paro que tenía antes de la crisis

La Comunidad castellanoleonesa no recuperará hasta 2022 los ritmos de creación de empleo y reducción de paro que tenía en 2007, antes de la crisis, para lo cual en el próximo lustro se necesitarían generar 110.000 nuevos puestos de trabajo y eliminar de las listas de desempleo a otras 80.000, según un estudio sobre 'El Mercado de Trabajo de España, Castilla y León y provincias' elaborado por CCOO.

El informe de la Secretaría de Empleo, Política Institucional y Diálogo Social de este sindicato, el "decano de los informes en materia de contratación", tal y como destaca Carlos Castedo, responsable del Gabinete Técnico y Jurídico, en referencia a que el mismo se viene emitiendo desde hace veinte años, maneja tales cifras a tenor del actual ritmo de crecimiento de la economía regional y tras el análisis de los últimos datos relativos a 2017, un año calificado de "muy pobre" en términos de creación de empleo y reducción del desempleo.

Con la vista puesta en los inicios de la crisis y los 165.700 empleos destruidos hasta 2013, el sindicato que lidera Vicente Andrés lamenta que desde entonces en Castilla y León sólo se haya podido recuperar un tercio de los contratos destruidos (55.300), mientras que esa recuperación en el conjunto del Estado se eleva a casi la mitad.

Así, el secretario regional de Empleo de CCOO, Saturnino Fernández, considera que si la previsión de crecimiento de la economía regional se mantiene en el 2,5 por ciento podrían alcanzarse ya en 2018 entre 20.000 y 23.000 nuevos empleos y cerca de 20.000 desempleados menos, aunque para ello el sindicalista pone como condición que el Gobierno y la patronal propicien un "cambio" para mejorar la calidad del mercado de trabajo.

De plazo, la primavera

En este sentido, Fernández ha sido claro al anunciar que su sindicato agudizará su calendario de movilizaciones si ambas partes no asumen que "toca ya cambio", tanto en salarios como condiciones laborales, de ahí que al margen de las propuestas de CCOO en materia de fiscalidad se reclame, ya esta primavera, un acuerdo para modificar la última reforma laboral que, a su juicio, está provocando una salida desigual de la crisis para la clase trabajadora.

"Si Gobierno y patronal no entienden que este año toca, las movilizaciones irán a más y no sabemos hasta dónde", amenaza Fernández, quien exige reformas en cuanto a contratación como negociación colectiva, formación para el empleo, intermediación con las agencias de colocación y prestaciones por desempleo, entre otras muchas.

Pero además de las perspectivas para este año, el informe de CCOO analiza el comportamiento registrado en 2017 en materia de contratación en Castilla y León, un año en el que el empleo creado y el descenso del empleo ha sido mucho menor que en los dos ejercicios precedentes, pero además con contratos temporales en su mayoría, de cada vez menor duración, y con un mayor encadenamiento, a lo que se suma un uso cada vez mayor de la contratación a tiempo parcial.

Tan sólo 6.900 empleos nuevos

En concreto, en 2017 se crearon tan sólo 6.900 nuevos empleos en Castilla y León, cifra muy inferior a los 19.000 y 25.900 generados en los años 2015 y 2016, respectivamente, es decir, ni siquiera un tercio del contabilizado en el primero de ambos ejercicios.

El pasado año fue el peor en creación de empleo porque el trabajo por cuenta propia disminuyó considerablemente, 13.100 menos--desde 2009 no se perdía tanto empleo de este tipo--, y por tanto sólo el empleo asalariado o por cuenta ajena ha sido el responsable de la creación de contratos en 2017.

Otro de los datos extraídos del estudio es la reducción del colectivo en edad de trabajar, 15.200 menos, lo que sitúa a Castilla y León en la primera posición en cuanto a mayor descenso, circunstancia que se explica tanto por el envejecimiento de la población y la marcha tanto de la población extranjera como de la propia a otros países y comunidades autónomas por falta de oportunidades.

Sin embargo, CCOO subraya, entre sus conclusiones, que mientras en España el incremento del empleo masculino y femenino es similar, en Castilla y León el primero es un punto más y el desempleo de las mujeres, además, desciende únicamente un 8%, la mitad que en el caso de los hombres.

En cuanto a los contratos temporales que se han registrado, el 65% tiene una duración menos de seis meses y tan sólo el 3% posee una duración mayor. Hay por tanto muchos contratos temporales y cada vez son más cortos, y por lo tanto una elevada rotación, lo que agrava la precariedad entre las personas con relaciones laborales inestables, sobre todo en el colectivo femenino. "La duración media de los contratos es de 55 días, ni siquiera de dos meses", denuncia Beatriz Sanz.

Del estudio, entre otras muchas conclusiones, se extrae también que durante el pasado año se produjo un descenso de 7.300 personas como beneficiarias de prestaciones por desempleo en la Comunidad. Así, la tasa de cobertura es del 49,7% en Castilla y León (56,2 en España) y por lo tanto en tan sólo siete años se ha reducido en casi 18 puntos en Castilla y León.