Un hombre de 59 años, vecino de Jaén, ha ingresado en prisión por orden del juzgado de Violencia de Género después de que este miércoles supuestamente agrediera a su exmujer con una horca de cinco puntas metálicas con la que intentó ensartarla, aunque los reflejos de la mujer le permitieron esquivar el envite. No obstante, la mujer resultó herida y tuvo que ser atendida por los servicios médicos ya que las puntas del apero de labranza le marcaron el costado.
Según informaron fuentes de la investigación a Europa Press, el suceso tuvo lugar sobre las 17,15 horas en una funeraria ubicada en la carretera de La Guardia cuando el hombre, que ya tiene antecedentes por violencia de género, comenzó a agredir a su mujer. En el transcurso de la agresión, en la que hubo numerosos golpes y bofetadas, se hizo con una horca de cinco puntas con la que intentó atravesarla, según declaró la propia víctima.
Cuando se personó la patrulla de la Policía Nacional, el presunto agresor había guardado el apero, pero reconoció abiertamente los hechos a los agentes ante los que insistió en que tarde o temprano acabaría por matarla.
El hombre fue detenido y traslado a la comisaría de la Policía Nacional en Jaén capital donde tras tomarle declaración ha sido puesto a disposición del Juzgado de Violencia de Género cuyo titular ha ordenado su ingreso inmediato en prisión tras escuchar en su declaración que el agresor se ratificaba en su intención de acabar con la vida de su expareja de la que se encuentra divorciado.
Por parte de la Fiscalía se le ha imputado un delito de amenazas graves y otro delito de lesiones graves, ambos con el agravante de parentesco. El auto del juez decretando su ingreso en prisión, según informaron fuentes judiciales a Europa Press, establece que la decisión de internamiento se produce por "una situación grave de riesgo" ya que los hechos ocurridos podrían tener la consideración de un delito de homicidio en grado de tentativa.
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