Tras una reunión escenificada en Cartagena, la canciller de la República, Delcy Rodríguez junto a su homóloga colombiana, María Ángela Holguín acordaron pautar nuevos encuentros bilaterales para atender el tema de la delincuencia organizada y el contrabando de gasolina en la zona fronteriza.
Rodríguez expresó que Venezuela y Colombia han dado el primer paso hacia la construcción conjunta de una nueva frontera binacional. Además, agregó que el Presidente Nicolás Maduro "se ha visto obligado" a cerrar el paso entre ambos territorios ante el desborde institucional por los delitos violentos en la región.
“La realidad es que Venezuela ha sido un espacio y una patria de cobijo para millones de ciudadanos colombianos que ven en nuestra patria un espacio donde convivir familiarmente. Mal podríamos estar nosotros maltratando a ciudadanos colombianos que además, son nuestros hermanos”.
Por su parte, la diplomática neogranadina reconoció que el comercio ilícito ha causado un daño a la economía venezolana, aunque insistió en que el cierre fronterizo no generará soluciones. Asimismo, informó que habrá una conversación de ministros de Defensa y Fuerzas Militares de ambas naciones.
“Estamos convencidos que el cierre de la frontera y, así se lo hemos transmitido a las autoridades venezolanas, no es el camino y no creemos que sea el camino para combatir este flagelo. Hay mucho movimiento legal en la frontera, mucha gente que vive de un lado y del otro que estudia de un lado o vive del otro y que necesita poder seguir movilizándose”.
Rodríguez añadió que existe un ataque contra la moneda nacional. Asimismo, insistió que el contrabando de productos desde Venezuela afecta gravemente, tanto a los venezolanos como a los residentes colombianos, que habitan en nuestro país. Pidió no dar cabida a la mentira mediática que, en su opinión, se dirige contra el Gobierno nacional.
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